La presidenta celebra elección del nuevo papa y destaca su compromiso con los pobres.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, anunció este jueves su intención de invitar al papa León XIV a visitar el país próximamente, tras ser electo como nuevo líder de la Iglesia católica en el cónclave celebrado en la Capilla Sixtina. Durante su conferencia matutina en Palacio Nacional, la mandataria felicitó a Robert Francis Prevost Martínez, nombre de nacimiento del nuevo pontífice.
Sheinbaum destacó que el nuevo papa representa una continuidad del legado de Francisco, fallecido el pasado 21 de abril. “Sabemos que es una persona con una orientación por los pobres y eso es muy bueno. Va a estar atento a las necesidades de quien menos tiene y a la construcción de la paz y la prosperidad en el mundo”, expresó.
La jefa del Ejecutivo federal subrayó la importancia de que un líder religioso mundial tenga una visión social, y calificó como alentador el perfil de León XIV, de 69 años, quien hasta antes de su elección se desempeñaba como prefecto del Dicasterio para los Obispos del Vaticano.
“Lo vamos a invitar para que venga a México. Ya habrá oportunidad de hacerlo”, puntualizó Sheinbaum, aunque descartó asistir personalmente a la misa de inicio de pontificado programada para el 18 de mayo en la Ciudad del Vaticano. “No creo que vaya, no sé si Rosa Icela quiera ir como representante, pero le deseamos al papa lo mejor”, dijo.
León XIV fue electo en el segundo día de deliberaciones del cónclave, donde participaron 133 cardenales de todo el mundo, incluidos dos mexicanos: Francisco Robles Ortega, arzobispo de Guadalajara, y Carlos Aguiar Retes, arzobispo primado de México.
Prevost, originario de Chicago pero con ascendencia latina, se convierte en el papa número 267 en la historia de la Iglesia. Su perfil pastoral, cercano a las causas sociales, ha generado expectativas positivas entre comunidades católicas de América Latina, particularmente en México.
México es el segundo país con mayor número de católicos en el mundo, con aproximadamente 111 millones de fieles, lo que convierte a cualquier visita papal en un acontecimiento de gran importancia nacional. La última vez que un papa visitó el país fue en 2016, cuando Francisco recorrió varias entidades federativas.
La Presidencia de la República señaló que la eventual visita del nuevo papa dependerá de la agenda diplomática y de la disponibilidad del Vaticano, pero reiteró que México mantiene un “profundo respeto y cercanía histórica” con el Estado vaticano y la Iglesia católica.
