Kate Cassidy, la última pareja sentimental del cantante Liam Payne, podría tener derecho a una parte de la herencia millonaria que dejó el exintegrante de One Direction, fallecido en octubre de 2024 a los 31 años.
Así lo señalan expertos legales consultados por el Daily Mail, quienes explican que, aunque Cassidy no figura en el testamento —ya que Payne murió sin redactar uno—, su vínculo emocional y dependencia económica podrían permitirle presentar un reclamo legal bajo la legislación vigente en el Reino Unido.
Lo último que se supo es que debido a la ausencia de testamento, la riqueza y bienes del artista se administrarían por las reglas de sucesión intestada.
De acuerdo con documentos judiciales citados por la prensa, el valor total del patrimonio de Payne ascendía a £28,594,888. Tras deducir deudas y honorarios, el monto neto fue de £24,279,728. Se trata de un aproximado de 32 millones de dólares americanos.
Bajo la ley británica, esta cantidad pasará íntegramente a su hijo Bear, de ocho años, fruto de su relación con la cantante Cheryl Tweedy, quien junto al abogado musical Richard Bray fue nombrada administradora temporal de la herencia.
A pesar de no haber estado casados ni comprometidos oficialmente, Cassidy, de 26 años, podría tener fundamentos para iniciar un proceso legal que le permita acceder a una porción de la herencia.
Los especialistas señalan que la Inheritance (Provision for Family and Dependants) Act 1975 contempla la posibilidad de que una persona que dependía económicamente del fallecido pueda reclamar “una provisión financiera razonable”.
Kathryn Tunbridge, abogada de la firma Furley Page, explicó al Daily Mail: “Como pareja no casada, Kate no tiene derecho automático a heredar nada, sin importar cuánto tiempo estuvieron juntos o si él la apoyaba financieramente. Sin embargo, si alguien dependía económicamente del fallecido al momento de su muerte, puede presentar un reclamo”.
No obstante, precisó que iniciar ese tipo de proceso “requiere pruebas y suele ser emocional y financieramente agotador”.
Por otro lado, The Sun reportó que en casos excepcionales podría considerarse un “acuerdo legalmente vinculante” si existen pruebas contundentes, como notas escritas a mano. En este caso, Kate posee una carta de Liam en la que escribió: “Kate y yo nos casaremos dentro del año y estaremos juntos para siempre 444”.
El número en cuestión tenía un significado especial para la pareja y Cassidy se lo tatuó junto a las iniciales de Liam.
Junto a esa nota, existen otros dos elementos que componen un “hat-trick” de evidencias que podrían fortalecer un reclamo legal: la declaración del amigo de Payne, Roger Nores, quien asegura que el artista le pidió ser su padrino de boda durante el viaje a Argentina.
