El bullpen de Yankees volvió a hacer agua. El abridor Carlos Rodón vio cómo los relevistas estropearon una sólida labor sin permitir carrera, mientras que Xander Bogaerts pegó un imparable productor de dos carreras para coronar un ataque de cuatro en la octava entrada y Padres de San Diego se impuso 4-3 a Yankees de Nueva York en el primer juego de la serie.
En un juego que superó una suspensión por lluvia de 28 minutos con dos outs en la parte baja del octavo inning, Yankees perdió por quinta ocasión un juego en el que llegó con ventaja a la octava entrada, la mayor cantidad de derrotas de esta forma para un equipo en lo que va de la temporada. Yankees ganaba 3-0 al momento de que Devin Williams entró a trabajar en la octava entrada.
Aunque retiró el primer tercio se metió en problemas al regalar una base y permitir un imparable. Parecía que salía del problema al ponchar a Fernando Tatis Jr., jugada que le costó la expulsión al dominicano y al manager de Padres, Mike Shildt. El venezolano Luis Arráez recibió pasaporte para llenar las bases y eso marcó la salida de Williams.
El cerrador de Yankees, Luke Weaver (0-1), quien había lucido dominante en sus recientes salidas, permitió un doblete productor de dos carreras de Manny Machado y luego el imparable de Bogaerts.
Yankees había tomado la ventaja con un cuadrangular de dos anotaciones de Trent Grisham en la tercera entrada. Luego agregó una más por elevado de sacrificio de Anthony Volpe.
Rodón trabajó seis entradas y dos tercios en las que permitió tres hits, regaló un pasaporte y ponchó a cinco bateadores.
