Una fuerte explosión en el puerto de Bandar Abás provoca muertes, heridos y graves daños materiales.
Una explosión ocurrida este sábado en el puerto de Shahid Rajai, en la ciudad de Bandar Abás, al sur de Irán, dejó al menos cinco muertos y más de 700 heridos, según reportaron medios iraníes. El incidente se produjo al mediodía, cuando varios contenedores en los muelles del puerto explotaron, causando un gran incendio que las autoridades aún intentan sofocar.
Babak Mahmudi, jefe de la Organización Nacional de Rescate, confirmó las primeras muertes, mientras que los servicios de emergencia indicaron que más de 700 personas resultaron heridas en el suceso, que también causó graves daños a edificios y vehículos cercanos. La fuerza de la explosión fue tan intensa que provocó una enorme onda expansiva, visible en las imágenes de una nube negra que cubrió el puerto y generó escenas de pánico en la zona.
Según las autoridades, los contenedores que explotaron probablemente almacenaban productos químicos. La portavoz del Gobierno, Fatemeh Mohajerani, indicó que, debido al incendio en curso, aún es complicado determinar con certeza las causas del siniestro. Las operaciones portuarias han sido suspendidas para permitir el control de la situación por parte de las fuerzas de seguridad y los equipos de socorro.
El presidente de Irán, Masud Pezeshkian, expresó su pesar y ordenó una investigación para esclarecer las causas del incidente. En respuesta a la emergencia, el ministro del Interior, Eskandar Momeni, fue enviado como representante especial del gobierno para evaluar la magnitud de los daños y coordinar la respuesta.
A pesar del impacto en la infraestructura del puerto, la Compañía Nacional de Refinado y Distribución de Petróleo de Irán aseguró que sus operaciones no se han visto afectadas. Shahid Rajai, principal puerto de contenedores del país, maneja el 80% del transporte de mercancías por esta vía y es considerado un importante centro económico, especialmente para la industria petrolera.
Este no es el primer incidente en el puerto de Shahid Rajai; en 2020, el puerto fue víctima de un ciberataque que paralizó temporalmente sus actividades, un ataque que Irán atribuyó a Israel.
