Más de 250 mil personas rindieron homenaje al pontífice durante tres días de velatorio.
La capilla ardiente del papa Francisco, instalada en la basílica de San Pedro, concluyó este viernes tras tres días de apertura para que los fieles pudieran despedirse del pontífice. A las 19:00 horas locales, se dio por terminado el desfile de los miles de peregrinos y se restringió el acceso solo a religiosos y personal del Vaticano en el interior del templo.
Desde el martes, cuando el cuerpo de Francisco fue trasladado al Vaticano, más de 250,000 personas se acercaron para rendirle homenaje. En un solemne acto, se iniciaron los preparativos para el funeral, que se celebrará este sábado en la Plaza de San Pedro.
El proceso de cierre del féretro comenzó a las 20:00 horas locales con una ceremonia privada, en la que se leyó el ‘rogito’, un acta que resume la vida y obra del papa argentino. Durante la ceremonia, el maestro de las Celebraciones Litúrgicas, Diego Ravelli, colocó un velo de seda blanca sobre el rostro del pontífice y roció su cuerpo con agua bendita.
Posteriormente, se insertaron las monedas y medallas acuñadas durante su papado, junto con el acta de su vida, en el ataúd. Tras sellar el documento con el sello oficial y colocar la tapa de zinc con los símbolos papales, el féretro fue cerrado de manera oficial.
Este sábado, el funeral del papa Francisco se celebrará en la Plaza de San Pedro, con la presencia de autoridades religiosas y representantes de diversos países. Posteriormente, su cuerpo será trasladado en un cortejo fúnebre hasta la basílica de Santa María la Mayor, donde recibirá sepultura.
