El pontífice ofició de sorpresa el matrimonio en el Vaticano, tras un correo agradeciendo la recuperación de su hija.
La inesperada recuperación de la pequeña Sara, luego de ser rociada con agua bendita estando internada, fue el puntapié para un intercambio por correo que terminó con el papa Francisco casando, por sorpresa y frente a sus hijas, a los uruguayos Noelia Franco y Omar Caballero en el Vaticano.
El 19 de septiembre de 2018, el sumo pontífice los recibió en una audiencia privada tras leer un correo enviado por la madre, quien recordaba cómo su hija menor salió adelante tras aplicar unas gotas de agua bendita traídas desde Roma. Aquel milagro los impulsó a agradecer personalmente al Papa.
Lo que comenzó como una carta de gratitud, terminó en un acto inesperado de fe y cercanía: el papa los casó en Casa Santa Marta, compartiendo además lo que llamó “el secreto del matrimonio feliz”: Contigo, pan y cebolla. Desde entonces, la familia dedica su vida a compartir esta historia de milagro, fe y esperanza.
