El cantautor español, artista principal del festival Sonorama Ribera, charla sobre su presentación en la CDMX

Nacho Vegas dedica el año para grabar su próximo disco, o sea que salir a dar conciertos lejos de casa no estaba en sus planes. ¿Pero cómo resistirse a la Ciudad de México, la capital mundial que más arropa sus versos y prosas? Sonriente, el gijonés asiente. Venir al festival Sonorama Ribera del Duero el próximo 26 de abril a Sala Urbana fue mucha tentación. También, como autor contestatario y opositor de cualquier forma de gobierno que atente contra la clase trabajadora, llegará a un país gobernado por una mujer, aún en el dichoso proceso de transformación, pero ahora bajo la dirección de una científica.
“Siempre he seguido la evolución sociopolítica de México, desde la primera vez que fui con Bunbury (2007) que, según recuerdo, Felipe Calderón llegó a la presidencia, tras un debate con López Obrador. Y el momento que pasamos ahora me parece que hay que verlo de forma internacionalista: Europa y Latinonamérica atestiguan un repunte de la extrema derecha.
Abnegación, parte del EP De púas y cuchillas (2023), es una de las rolas más contestatarias que ha salido del espíritu combativo de Nacho, siendo una mirada a la vorágine del mundo actual. Sin olvidar Ámenme, soy un liberal, Ciudad vampira, Big Crunch y la más reciente, Los años nuevos, que hizo para la serie de Rodrigo Sorogoyen, Los años nuevos (2024).
Cuando comenzó su carrera, siendo un chaval en el grupo Manta Ray, ese espíritu rebelde era parte de los códigos inherentes del rocanrol, pero cree que los chavos de ahora están a la deriva de ser llamados “fachos”, simplemente por mostrarse en contra del sistema. El show de CDMX versará alrededor de ese sentimiento, con canciones que adora la gente y otras que darán sentido al momento anímico del asturiano. ¿Llega a una sensación de rabia? En parte, sobre todo al percatarse de que el contexto empeora poco a poco.