Sinaloa, Durango, Guerrero y Chihuahua entre las entidades con mayores hallazgos.

Elementos del Ejército Mexicano destruyeron en una sola jornada 203 plantíos ilegales de amapola y mariguana en seis estados del país. La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) informó que las acciones fueron parte de operativos de reconocimiento terrestre y aéreo.
Del total, 146 sembradíos eran de amapola y 57 de mariguana, ubicados en zonas serranas de difícil acceso. Los estados intervenidos fueron Chihuahua, Sinaloa, Durango, Guerrero, Zacatecas y Oaxaca, entidades donde históricamente se ha documentado alta presencia del crimen organizado vinculado a la producción de drogas.
En superficie, las fuerzas armadas destruyeron 11.8 hectáreas de amapola y cinco de mariguana, lo que representa 3.6 veces el tamaño del Zócalo de la Ciudad de México, uno de los referentes urbanos más grandes del país.
La Sedena destacó que estas acciones forman parte de la Estrategia Nacional de Seguridad, que incluye como ejes principales la atención a las causas del delito, el fortalecimiento de la Guardia Nacional, la mejora en inteligencia e investigación, y la coordinación con autoridades estatales.
Sin embargo, especialistas en seguridad han señalado que la destrucción de plantíos no ataca el corazón financiero del narcotráfico, ya que las organizaciones criminales suelen resembrar rápidamente o diversificar cultivos, y la persecución rara vez se acompaña de procesos judiciales contra los verdaderos líderes.
Además, comunidades rurales donde se llevan a cabo estos operativos siguen enfrentando pobreza extrema y abandono institucional, lo que perpetúa el ciclo de violencia y dependencia del cultivo ilícito. Sin alternativas reales, la erradicación de plantíos se vuelve una medida paliativa y no estructural.