Comisión Nacional de los Derechos Humanos acusa a elementos del Ejército de uso excesivo de la fuerza y violaciones graves a los derechos humanos
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) responsabilizó a elementos del Ejército Mexicano por el asesinato de seis migrantes —entre ellos una menor de edad— en un operativo militar realizado el 1 de octubre de 2024 en Chiapas. En su más reciente informe, el organismo autónomo concluyó que los soldados incurrieron en el uso ilegítimo de armas de fuego, sin intentar antes ninguna maniobra menos letal para detener al vehículo en el que se trasladaban las víctimas, originarias de Egipto, El Salvador y Perú.
La agresión, que dejó además nueve heridos y 19 migrantes ilesos, ocurrió el mismo día en que Claudia Sheinbaum asumió la presidencia de México, en medio de una operación de patrullaje militar en zonas disputadas por los cárteles de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación. La CNDH encontró indicios que convierten a dos militares en directamente responsables del ataque, y solicitó a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) la reparación del daño, así como la creación de un Protocolo de Atención a Personas Migrantes.
El organismo destacó que la actuación de los soldados constituyó una violación grave a los derechos humanos, al no existir justificación para el uso letal de la fuerza contra civiles desarmados. También se pronunció por una urgente revisión de la política de seguridad y migración, que mantiene desplegados a más de 36 mil elementos militares en funciones que no les corresponden.
Hasta el momento, ni la Sedena ni la Presidencia de la República han emitido posicionamiento oficial sobre el informe. Diputados de oposición han exigido comparecencias inmediatas y la intervención de organismos internacionales. El caso se perfila como uno de los más graves del actual sexenio en materia de derechos humanos.
