El expresidente Donald Trump califica el ajuste de relojes como una “molestia costosa” y pide al Congreso adoptar un horario fijo durante todo el año.
El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a tomar una postura firme en contra del cambio de horario estacional y exhortó este viernes al Congreso a eliminarlo de manera definitiva. A través de un mensaje publicado en su red social Truth Social, Trump afirmó que cambiar los relojes dos veces al año es “una gran molestia y un evento MUY CARO para nuestro Gobierno”, firmando el mensaje con sus iniciales “DJT”.
“Debemos tener más luz al final del día. Es algo muy popular y necesario”, sostuvo el exmandatario, argumentando que la mayoría de los ciudadanos están a favor de un horario fijo que permita aprovechar mejor la luz natural, especialmente durante las tardes.
Actualmente, el senador republicano Ted Cruz lidera una iniciativa legislativa que busca mantener un solo horario durante todo el año. No obstante, en el Congreso persiste la división sobre cuál debe ser el estándar definitivo: el horario de verano, que alarga las tardes luminosas, o el de invierno, que proporciona más luz en las mañanas.
El debate sobre la permanencia de un solo horario no es nuevo, pero ha cobrado fuerza en años recientes debido al cuestionamiento de su utilidad en la vida moderna. Aunque originalmente se instauró para ahorrar energía, muchos expertos argumentan que sus beneficios son mínimos y que podría tener efectos negativos en la salud y productividad de las personas.
Mientras tanto, regiones como México ya han tomado decisiones al respecto. En 2022, el país eliminó oficialmente los cambios de horario, sumándose a una tendencia global que también ha sido considerada por países europeos y Canadá, que evalúan abandonar la práctica de los ajustes estacionales.
Trump, que mantiene una presencia política activa y busca volver a la Casa Blanca en 2024, ha convertido esta propuesta en uno de los temas populares entre su base, apelando a medidas que prometen simplificar la vida cotidiana y reducir costos innecesarios para el gobierno federal.
