Basado en investigaciones reales, el filme muestra cómo miles de jóvenes son víctimas del crimen organizado en un país donde más de 120 mil personas están desaparecidas.

En tan solo seis minutos, el cortometraje El Examen presenta un retrato crudo y revelador sobre lo que significa ser joven en México, a través de la historia ficticia de Ariel, un estudiante interpretado por Alexis Varela (Sujo, 2024). Durante su estreno en la Ciudad de México, el periodista e investigador Manu Ureste señaló que la obra denuncia la realidad de casi medio millón de menores de 29 años que han sido asesinados, agredidos o reclutados forzosamente por el crimen organizado.
“La juventud en México se ha convertido en carne de cañón”, afirmó Ureste, quien también lideró la investigación México destruyendo el futuro, en colaboración con Animal Político y la organización México Unido Contra la Delincuencia. Según el periodista, a pesar de inversiones millonarias como el programa Jóvenes Construyendo el Futuro, el reclutamiento forzado sigue siendo una grave problemática que no se resuelve con subsidios, sino que requiere atención estructural y políticas integrales.
El director y guionista del filme, Nicolás Bongiovanni, explicó que aunque El Examen es ficción, está basado en múltiples reportajes periodísticos que reflejan las vivencias reales de miles de jóvenes en estados como Michoacán, Jalisco y Chihuahua, donde las condiciones sociales y la falta de oportunidades educativas y laborales los vuelven altamente vulnerables. “Ariel representa a muchos jóvenes que no tienen opción”, afirmó.
Ureste relató que en sus recorridos por comunidades afectadas, ha documentado casos en los que grupos criminales reclutan jóvenes por la fuerza, amenazándolos de muerte o desapareciéndolos si se niegan. También destacó la estrategia de engaños mediante redes sociales, donde los cárteles ofrecen supuestos empleos para atraer a los jóvenes, así como la creciente influencia de la narcocultura como aspiración.
Desde la guerra contra el narcotráfico iniciada por Felipe Calderón en 2006, la situación no ha hecho más que agravarse, advirtió Ureste, y aunque nuevos casos como el supuesto rancho de entrenamiento del narco en Teuchitlán (Jalisco) vuelven a colocar al país bajo los reflectores internacionales, la respuesta gubernamental suele ser minimizar o negar la crisis. “Tenemos un gobierno que se enoja cuando las Naciones Unidas hablan de desapariciones en México”, concluyó el periodista.
El Examen se convierte así en una poderosa herramienta para visibilizar una tragedia nacional que, aunque no siempre ocupa titulares, marca de forma irreversible el futuro de toda una generación.