Rusia subraya su inquietud por la escalada de la disputa comercial entre las dos principales economías globales y reafirma su compromiso con China como socio comercial estratégico.

Rusia ha expresado este miércoles su “gran preocupación” ante el empeoramiento de la guerra comercial entre Estados Unidos y China, y ha confirmado que reforzará su relación estratégica con Pekín, al que considera su “socio comercial a largo plazo”.
Maria Zajarova, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, reconoció que la creciente tensión entre dos de las economías más poderosas del mundo genera inquietud en Moscú. «La situación que afecta a dos importantes economías mundiales, una de las cuales es nuestro socio comercial a largo plazo, genera gran preocupación», declaró Zajarova, según la agencia de noticias TASS.
La portavoz añadió que Rusia tomará las medidas necesarias para evitar que las consecuencias de esta nueva disputa comercial entre Estados Unidos y China afecten negativamente a su propia economía.
El último episodio de la guerra comercial fue protagonizado por China, que a partir de este jueves aumentará de un 34% a un 84% las tarifas adicionales sobre las mercancías estadounidenses importadas. Esta medida fue vista por Washington como un golpe a Pekín, que según la administración estadounidense, se verá más perjudicado por estas acciones.
Zajarova también reprochó a Estados Unidos por actuar al margen de las normas fundamentales de la Organización Mundial del Comercio (OMC) y por abandonar los principios del derecho mercantil internacional en favor de políticas proteccionistas unilaterales.
El Gobierno ruso subrayó que cualquier alteración en el comercio global que pueda llevar a una desaceleración del crecimiento económico mundial y una caída del consumo tendría un impacto negativo en muchos procesos económicos a nivel global.