Los reporteros, entre ellos un fotógrafo galardonado con el World Press Photo, fueron arrestados durante una redada y enviados a prisión preventiva por cubrir manifestaciones en Estambul.

Un juzgado de Estambul decretó prisión preventiva para siete periodistas, quienes fueron arrestados en sus domicilios durante una redada ordenada por la Fiscalía de Turquía. Entre ellos se encuentra Bülent Kiliç, fotógrafo premiado con el World Press Photo, y otros reporteros que cubrían las protestas contra la detención del líder opositor Ekrem Imamoglu.
Las manifestaciones, organizadas por el Partido Republicano del Pueblo (CHP), han reunido a decenas de miles de personas frente a la alcaldía de Estambul desde el miércoles pasado. Aunque la policía permitió las concentraciones, ha realizado operativos de dispersión con gas lacrimógeno.
Los detenidos fueron inicialmente informados de que quedarían en libertad bajo control judicial, pero la Fiscalía modificó su decisión a última hora, ordenando su encarcelamiento. La Asociación de Periodistas de Turquía (TGS) denunció que la acusación principal en su contra es la cobertura fotográfica de las protestas, considerada por las autoridades como prueba de su participación en una manifestación ilegal.
En total, 206 personas fueron arrestadas en redadas nocturnas y 81, incluidos los periodistas, fueron enviados a prisión preventiva. La medida ha generado críticas de organizaciones de prensa, que la califican como un intento de criminalizar el ejercicio periodístico y limitar la libertad de información en el país.
El Ministerio del Interior de Turquía prohibió cualquier tipo de protesta en Estambul desde la semana pasada, intensificando las medidas de represión contra los manifestantes y periodistas que informan sobre la crisis política.