
En un duelo trascendental celebrado en el Arena Națională de Bucarest, Rumanía se enfrentó a Bosnia y Herzegovina el 21 de marzo de 2025, en la primera jornada de los Clasificatorios Europeos de 2026.
El partido se reactivó rápidamente, con Armin Gigovic adelantando a Bosnia y Herzegovina en el minuto 15, anotando el único gol del encuentro. Fue un gol crucial que marcó el dominio de Bosnia en los primeros compases, ya que mantuvo el 100% de la posesión y solo disparó a puerta, dejando a Rumanía con dificultades para encontrar su ritmo ante la sólida defensa de sus rivales.
Durante los primeros 15 minutos, las estadísticas mostraron que Rumanía aún no había dejado huella, con cero disparos a portería, ninguna falta cometida y una alarmante escasez de pases precisos. En contraste, el dominio estadístico de Bosnia reflejó su control del partido. A pesar de los esfuerzos de Rumanía por recomponerse, les resultó difícil romper la sólida defensa del equipo de Barbarez, que presionó sin descanso.
A medida que avanzaba el partido, el capitán rumano, Nicolae Stanciu, intentó animar a sus compañeros y crear jugadas de ataque, pero la férrea defensa bosnia lo frustró con frecuencia, lo que culminó en varias oportunidades desaprovechadas. El seleccionador rumano, Mircea Lucescu, buscó ajustes tácticos, pero no logró descifrar la estructura defensiva de su rival.
El árbitro del partido, Danny Makkelie, dirigió el partido durante todo el encuentro sin incidentes conflictivos, garantizando que el juego fluyera sin problemas en lo que se esperaba que fuera un encuentro muy reñido.
A pesar de jugar en casa, Rumanía no logró convertir sus ocasiones en goles. Cada intento parecía desmantelado sistemáticamente por la organizada defensa bosnia, lo que condujo a una contundente victoria para los visitantes. El gol de Armin Gigovic fue decisivo en un partido que reforzó la renovada confianza de Bosnia al iniciar su campaña de clasificación.
Edin Dzeko, figura clave de su equipo, destaca por su experiencia y destreza, habiendo marcado recientemente contra Alemania. Por su parte, el rumano Daniel Birligea, conocido por su reciente actuación goleadora contra Chipre, también buscó destacar en este choque.
Este encuentro no sólo sirve como un momento crucial en la campaña de clasificación para ambos equipos, sino que también resalta las trayectorias contrastantes que las dos naciones han tomado en los últimos años en el fútbol internacional.