La Reserva Federal de EE.UU. mantiene su postura cautelosa, sin esperar recortes inmediatos, mientras analiza el impacto de las políticas de Trump y la inflación.

La Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) comenzó su reunión de política monetaria sin expectativas de anunciar nuevos recortes en las tasas de interés. Los mercados anticipan que los tipos permanecerán entre el 4.25% y el 4.5%, como en la junta de enero.
La mayoría de los analistas coinciden en que la Fed adoptará una postura más prudente y lenta en cuanto a recortes en 2025, en parte debido a la incertidumbre generada por la política arancelaria del Gobierno de Donald Trump. Esta situación podría retrasar los planes de flexibilización monetaria previstos para el próximo año.
En un contexto donde la inflación sigue por encima de la meta del 2% —el dato de febrero mostró una subida de precios interanual del 2.8%, con una inflación subyacente del 3.1%—, muchos economistas creen que la Fed continuará priorizando la lucha contra la inflación antes de hacer recortes significativos en las tasas. Paolo Zanghieri, economista senior de Generali Investments, destacó que la incertidumbre sobre las reformas económicas de la nueva administración estadounidense podría generar presiones al alza para la inflación y riesgos a la baja para el empleo.
Por su parte, François Rimeu, estratega sénior de Crédit Mutuel Asset Management, subraya que el presidente de la Fed, Jerome Powell, continuará defendiendo la paciencia en cuanto a los futuros recortes, dada la incertidumbre sobre los efectos de las políticas de Trump. En este entorno, la Fed podría reducir el número de recortes proyectados para 2025, incluso a solo uno.
Al concluir la reunión, el FOMC publicará también una actualización de sus proyecciones macroeconómicas, que ofrecerá más claridad sobre la dirección futura de la política monetaria.