Antes de salir a correr o iniciar una dieta alta en proteínas, los especialistas recomiendan que las personas con obesidad acudan al médico

Si una persona padece obesidad, lo mejor es que vea a un médico antes que a un entrenador personal.
El ejercicio es fundamental y formará parte de los nuevos hábitos de vida, pero lo primero, afirman los especialistas que tratan esta enfermedad crónica, pasa por acudir a la consulta. Se necesita un tutelaje, un acompañamiento, esgrime Gabriel Cuatrecasas, coordinador del grupo de obesidad de la Sociedad Catalana de Medicina de Familia y Comunitaria.
Los médicos de atención primaria, recuerda Cuatrecasas, están habituados a tratar la diabetes, la hipertensión o el colesterol, que en ocasiones acompañan a la persona de por vida. “Tiene sentido entonces que manejemos nosotros también la obesidad, puede causar todo lo anterior y es una enfermedad crónica”, afirma.
No todos los pacientes a los que ve tienen un exceso de grasa que requiera atención hospitalaria o acudir a la consulta de un endocrino, advierte. Pero un médico de atención primaria por sí solo tampoco se basta para tratar una enfermedad tan compleja, que afecta a las articulaciones, al sueño, a los órganos vitales, a la salud mental… Requieren de la ayuda de enfermeras, nutricionistas y psicólogas.
En algunos centros de Cataluña, cuenta el médico, ya han incorporado estos perfiles para tratar a los pacientes de forma multidisciplinar, como dicen en su argot.
La presencia de nutricionistas en los equipos de los ambulatorios se está implantando de forma progresiva en centros de otras comunidades, como Galicia, Comunidad Valenciana o La Rioja, aunque se encuentra en las primeras fases todavía.