
Chivas jugó a no perder y desenlace resultó mejor de lo pensado. Fortuito triunfo (1-0) en la Ida de los Octavos de Final de la Copa de Campeones de la Concacaf. La primera batalla se pintó rojiblanca en el estadio Akron.
Gerardo Espinoza tuvo menos de tres días para trabajar con el Guadalajara y en el futbol el cambio fue mínimo, pero en actitud el chip fue otro. Las Águilas dominaron el cotejo, pero nunca pudieron ante un Rebaño que supo cerrar sus espacios.
El primer tiempo fue trabado, se presentaron 18 faltas (10 de las Chivas) y muy pocas ideas en el arco rival. De muy poco sirvió a los de Andre Jardine tener controlado el encuentro. Parecía cuestión de tiempo para las Águilas, pero la historia fue distinta.Al minuto 15 hubo polémica por una accidental mano de Luis Romo dentro del área rojiblanca, pero el silbante canadiense Drew Fischer consideró que no era para marcar la pena máxima. El reclamo de Andre Jardine fue severo al cuerpo arbitral.
En la segunda parte las ideas fueron escasearon en los amarillos y Chivas tomó ligeramente más el esférico.Al minuto 78, una accidental jugada rompió el cero en el Akron. Un centro que parecía no tener nada, fue rechazado de puños por Luis Ángel Malagón, pero el balón fue estrellado en la cabeza de Sebastián Cáceres para quedar en el fondo de la portería azulcrema.