El Gobierno mexicano entregó a 29 reos, entre ellos Rafael Caro Quintero, a EE. UU. por motivos de seguridad, sin haber realizado una extradición formal, según explicó el fiscal general.
El Gabinete de Seguridad del Gobierno de México reveló los detalles del traslado de 29 individuos, incluidos importantes generadores de violencia como el narcotraficante Rafael Caro Quintero, a los Estados Unidos. El secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, explicó que los reos eran requeridos en EE. UU. por delitos graves como delincuencia organizada, tráfico de drogas, homicidio, secuestro y tráfico de armas, entre otros.
El funcionario destacó que el traslado de estos individuos fue necesario ante la existencia de riesgos sobre posibles liberaciones o demoras en sus procesos de extradición, y subrayó que esta acción fue tomada por razones de seguridad, tanto para México como para Estados Unidos. García Harfuch señaló que este acto de autoridad refleja la política de seguridad del gobierno mexicano, coordinada con la Fiscalía General de la República (FGR).
Por su parte, el fiscal general Alejandro Gertz Manero aclaró que los 29 reos no fueron extraditados, sino entregados al gobierno de Estados Unidos, enfatizando que la decisión se basó exclusivamente en cuestiones de seguridad. Asimismo, Gertz Manero pidió no especular sobre las posibles penas que enfrentarían los reos, luego de que el Departamento de Justicia de EE. UU. advirtiera que algunos de ellos podrían ser condenados a la pena de muerte.
Este traslado marca un paso importante en la cooperación entre México y Estados Unidos en el combate al crimen organizado y la violencia.
