La embajada coreana en México reprobó cualquier agresión hacia los jóvenes debido a sus gustos por la cultura coreana
La embajada de Corea en México emitió un comunicado condenando enérgicamente la agresión que sufrió Fátima Maite, una niña de 13 años, quien fue arrojada desde el tercer piso de su secundaria en la alcaldía Iztapalapa por ser fan del K-pop. Este acto de violencia dejó a la menor con un estado de salud delicado, habiendo sufrido fracturas graves y necesitando varias transfusiones de sangre. La situación ha generado una ola de indignación tanto en México como en Corea.
En su mensaje, la embajada expresó su firme rechazo a cualquier tipo de agresión física, verbal, psicológica o cibernética que los jóvenes sufran por sus aficiones a la cultura coreana, como el K-pop. La legación diplomática recordó que los valores del K-pop promueven la diversidad, la inclusión y el sano esparcimiento, destacando que este tipo de comportamientos son completamente contrarios a los ideales de la cultura Hallyu.
“Reprobamos cualquier agresión física, verbal, psicológica o cibernética que jóvenes sufran por sus aficiones a Corea”, mencionó la embajada en su comunicado, exhortando a las autoridades mexicanas a poner atención a actos de acoso dentro de las escuelas y comunidades. En su mensaje, también se utilizó el hashtag #FuerzaFatima y #JusticiaParaFatima para unirse al llamado de justicia.
De acuerdo con el relato del padre de la menor, Juan Z, Fátima había estado siendo acosada durante meses por una compañera antes de que ocurriera el ataque. La agresión no solo fue ignorada por las autoridades escolares, sino que la familia también enfrenta dificultades económicas para cubrir los gastos médicos, ya que Fátima ha requerido transfusiones y atención hospitalaria urgente. La caída dejó a la adolescente con fracturas graves, incluyendo una en la pelvis, y los médicos temen que no pueda volver a caminar.
Desde las redes sociales, la fanbase mexicana de BTS, uno de los grupos de K-pop más populares, condenó los hechos. Los seguidores de la banda alzaron la voz para reclamar justicia por Fátima, afirmando que “la música no divide, la ignorancia sí”, y subrayaron que el bullying no debe ser trivializado ni ignorado.
A través de sus mensajes, los fans de BTS expresaron que los valores del grupo, como la aceptación y la empatía, inspiraron a su comunidad a unirse en defensa de la justicia para Fátima, haciendo un llamado a las autoridades para que tomen medidas inmediatas para prevenir este tipo de violencia y acoso en las escuelas.
El caso de Fátima ha puesto de manifiesto el daño causado por la intolerancia y los prejuicios hacia la cultura K-pop y otros gustos personales. Los seguidores de BTS concluyeron que “el respeto no es una opción, es una obligación”, reafirmando que como sociedad es fundamental enseñar a las nuevas generaciones a respetar las diferencias, sin importar los gustos musicales o las preferencias personales de cada individuo.
Ahora, la comunidad espera que este caso se tome con la urgencia y seriedad que merece, y que se implementen políticas efectivas en las escuelas para prevenir el acoso y la violencia en todas sus formas.
