El Real Madrid no pudo mantener la ventaja y empató 1-1 contra Osasuna, dejando al Atlético con la posibilidad de arrebatar el liderato de LaLiga.
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El Real Madrid vivió una tarde de altibajos y polémica al empatar 1-1 con el Osasuna en su último partido de LaLiga, lo que deja la puerta abierta para que el Atlético de Madrid pueda arrebatarle el liderato si vence al Celta de Vigo más tarde.
El partido comenzó de manera prometedora para los merengues, que dominaron la posesión y generaron buenas oportunidades de gol. Vinícius Júnior tuvo una clara ocasión para adelantar al equipo, pero falló frente al portero rival. Sin embargo, el delantero Kylian Mbappé sí aprovechó una jugada colectiva y marcó el primer gol en el minuto 15, luego de un pase preciso de Valverde.
Con el marcador a su favor, el Real Madrid parecía tener el control, pero el encuentro dio un giro inesperado cuando el árbitro expulsó a Jude Bellingham por protestas en el minuto 39. Esta decisión, que dejó al Real Madrid con un jugador menos, sembró incertidumbre en los jugadores y afición. A pesar de los esfuerzos de Courtois para mantener la ventaja con varias intervenciones clave, la ventaja numérica de Osasuna les dio más opciones para atacar.
Ya en el segundo tiempo, un polémico pisotón de Eduardo Camavinga sobre Ante Budimir fue revisado por el VAR, lo que resultó en un penalti a favor del Osasuna. Budimir no falló y empató el partido en el minuto 58, lo que dejó al Real Madrid en una situación complicada.
El equipo de Carlo Ancelotti intentó reaccionar y buscar el gol de la victoria, pero a pesar de sus esfuerzos, el marcador se mantuvo 1-1 hasta el final, lo que deja al Real Madrid con 51 puntos, a tan solo dos puntos de distancia del Atlético, que tiene 49 y podría superarlo si gana esta tarde.
El empate ha dejado a la LaLiga más emocionante que nunca, con el Atlético de Madrid al acecho del liderato.