La jueza Deborah Boardman reitera que la interpretación de Trump sobre la Decimocuarta Enmienda no ha sido respaldada por ningún tribunal estadounidense.
Una jueza federal en EE.UU., Deborah Boardman, ha ordenado una segunda pausa a nivel nacional sobre la orden ejecutiva de Donald Trump, que buscaba prohibir la ciudadanía por derecho de nacimiento para los hijos de migrantes indocumentados o con estatus temporal nacidos en territorio estadounidense.
Boardman dejó claro que ningún tribunal en EE.UU. ha respaldado la interpretación de la Decimocuarta Enmienda realizada por el presidente, señalando que “este tribunal no será el primero”. La Enmienda 14 establece que cualquier persona nacida en EE.UU. tiene derecho automático a la nacionalidad, sin importar el estatus migratorio de los padres.
El decreto de Trump, firmado poco después de asumir su mandato, dictaba que los hijos de padres indocumentados o con estatus “temporal” (como visas de trabajo) no deberían obtener la ciudadanía. Esta medida habría afectado a la emisión de pasaportes y el reconocimiento como ciudadanos por parte de la Administración de la Seguridad Social, dificultando su acceso a derechos básicos y la capacidad de trabajar legalmente en el país.
El gobierno federal aún no ha decidido si apelará la decisión de la jueza Boardman. El fallo se produjo después de una demanda de defensa de derechos de inmigrantes y mujeres embarazadas, quienes argumentaron que la ciudadanía por nacimiento es un derecho fundamental protegido por la Constitución de EE.UU.
Este es el segundo revés judicial que enfrenta la orden de Trump. Anteriormente, una corte ya había suspendido la medida de manera temporal tras una demanda interpuesta por cuatro estados, calificando la orden como “flagrantemente inconstitucional”.
La lucha legal sobre este tema continúa, con 22 estados y varias organizaciones demandando la detención de la orden ejecutiva, que aún sigue siendo un tema central en la política migratoria de la administración de Trump.