La Casa Blanca anuncia el traslado de migrantes arrestados en territorio estadounidense hacia la Base Militar de Guantánamo, que se convertirá en un centro de detención para personas migrantes.
El gobierno de Estados Unidos ha dado inicio al traslado de migrantes detenidos en su territorio hacia un centro de detención en la Base Militar de Guantánamo, en Cuba. La portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, confirmó el envío del primer vuelo con migrantes detenidos hacia este destino, una medida que marca un cambio significativo en la política migratoria de la nación.
Según Leavitt, esta acción forma parte de un esfuerzo para garantizar que Estados Unidos no sea considerado un “vertedero de criminales ilegales” provenientes de diversas naciones, una declaración que resalta el enfoque de endurecer las políticas migratorias del país.
El vuelo que partió de Carolina del Norte contó con más de 150 marines de Estados Unidos, quienes serán responsables de adaptar la prisión militar de Guantánamo como un centro de detención exclusivo para migrantes. Este cambio en la utilización de la base ha generado controversia, con diversos grupos de derechos humanos criticando la medida, argumentando que la reconfiguración de la prisión podría poner en riesgo los derechos de los detenidos.
Este movimiento es parte de un esfuerzo mayor de la administración para enfrentar lo que consideran una creciente crisis migratoria, aunque algunos analistas advierten que las condiciones en Guantánamo, que han sido objeto de críticas en el pasado, podrían empeorar la situación de los migrantes detenidos allí.
