Las empresas dejarán de ser productivas del Estado para convertirse en empresas públicas.
La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo firmó y envió al Congreso de la Unión las leyes secundarias en materia energética, con las cuales Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE) se convertirán en empresas públicas del Estado, en lugar de empresas productivas del Estado.
Durante su conferencia matutina en Palacio Nacional, Sheinbaum detalló que esta reforma busca garantizar que Pemex y CFE regresen “a las manos del pueblo de México” y operen bajo principios de austeridad, eficiencia y transparencia.
“Recuerden que entre las reformas constitucionales aprobadas por el Congreso de la Unión y los estatales, que ya fueron publicadas, se encuentra el regreso de Pemex y CFE a las manos del pueblo de México”, explicó.
Sheinbaum Pardo señaló que la reforma busca revertir los efectos de la reforma energética de 2013, implementada en el sexenio de Enrique Peña Nieto, la cual —según la mandataria— no cumplió con sus promesas de aumentar la producción de petróleo y evitar el endeudamiento de Pemex.
“Cuando se consumó la reforma energética, decían que ya no se iba a endeudar Pemex, pero lo endeudaron al doble. Dijeron que aumentaría la producción, pero solo cayó. En electricidad, aseguraron que la CFE mejoraría, pero terminó con solo el 15% del mercado eléctrico”, criticó Sheinbaum.
La secretaria de Energía, Luz Elena González, explicó el impacto de las leyes secundarias, las cuales permitirán una inversión de 23 mil 400 millones de pesos en infraestructura energética:
CFE: 12 mil 300 millones de pesos en generación, 7 mil 500 millones en redes de interconexión y 3 mil 600 millones en distribución (subestaciones, transformadores y líneas de alimentación).
Pemex: implementación de nuevas tecnologías para exploración de yacimientos e inversiones en proyectos de energía limpia en colaboración con privados.
Además, la reforma propone la creación de una Comisión Nacional de Energía (CNE), que tendrá facultades para:
- Supervisar la cadena logística de gas natural y petrolíferos.
- Asistir técnicamente a la Secretaría de Energía.
- Monitorear las tarifas de combustibles y electricidad.
- Vigilar el mercado eléctrico mayorista.
Se prevé que la reforma garantice:
- Que la CFE mantenga la continuidad, accesibilidad y confiabilidad del Sistema Eléctrico Nacional.
- Que no haya incrementos en las tarifas eléctricas por encima de la inflación.
- Que se regule la participación de privados de manera ordenada y transparente.
- La simplificación de procesos y trámites mediante una Ventanilla Única para inversiones.
Las leyes secundarias serán analizadas y votadas por el Congreso de la Unión en los próximos días. De ser aprobadas, se consolidaría un nuevo modelo de gestión energética en México, centrado en el fortalecimiento del Estado como rector del sector.
Con esta iniciativa, Sheinbaum busca dar un giro a la política energética del país, asegurando que Pemex y CFE sean más eficientes y autosuficientes, sin depender del capital privado para su operación.
