La Secretaría de Salud anuncia nuevos estudios para evaluar el impacto de la pandemia en el uso de drogas, con resultados esperados este año.
La Secretaría de Salud (SSalud) destacó la necesidad urgente de analizar el impacto de la pandemia de COVID-19 en el consumo de drogas en México, dado que investigaciones recientes han detectado cambios significativos en esta problemática. Estudios realizados por el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), el Instituto Nacional de Psiquiatría y el Instituto de Neurobiología de la UNAM sugieren que la pandemia pudo haber alterado los patrones de consumo de sustancias, con implicaciones importantes para la salud pública.
En un comunicado, la dependencia anunció que el INSP, en colaboración con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), se encuentra levantando los datos necesarios para la Encuesta Nacional de Salud Mental y Adicciones, cuyos resultados serán publicados este año.
“Al ser un problema de salud pública con consecuencias severas en el comportamiento, afección cognitiva, e incluso trastornos neurobiológicos, hemos decidido profundizar los estudios sobre adicciones para comprender mejor el impacto del consumo de drogas en el país”, indicó la Secretaría de Salud en su informe.
La encuesta incluirá datos recopilados por los Centros de Integración Juvenil (CIJ), una red clave en el tratamiento y la prevención de las adicciones en México. Este esfuerzo es especialmente relevante, ya que desde hace ocho años no se publica un análisis nacional integral sobre salud mental y adicciones.
Las investigaciones preliminares sugieren que la pandemia amplificó factores de riesgo como el estrés, el aislamiento social y la incertidumbre económica, que están directamente relacionados con el aumento en el consumo de sustancias adictivas. Además, se han identificado posibles consecuencias neurobiológicas y alteraciones en el comportamiento en personas afectadas.
La publicación de estos estudios permitirá diseñar políticas públicas más efectivas y adaptadas a la nueva realidad post-pandemia, señalaron autoridades de salud. Asimismo, contribuirán a reforzar las estrategias de prevención y tratamiento en todo el país, en particular entre los grupos más vulnerables, como los jóvenes.
La última Encuesta Nacional de Salud Mental y Adicciones fue publicada hace ocho años, dejando un vacío importante en el monitoreo de esta problemática. Con el contexto de la pandemia como marco, los nuevos resultados prometen ser un hito para la comprensión y abordaje de las adicciones en México.
El informe completo se espera para la segunda mitad del año, y se prevé que incluya recomendaciones concretas para fortalecer los programas de salud pública, incluyendo las campañas de prevención y las opciones de tratamiento en las instituciones del sector salud.