El Proyecto Saguaro de Gas Natural Licuado (GNL) amenaza con convertirse en la principal causa de muerte de grandes ballenas por colisiones
El Proyecto Saguaro de Gas Natural Licuado (GNL) amenaza con convertirse en la principal causa de muerte de grandes ballenas por colisiones, así como el origen de serias perturbaciones acústicas y conductuales en al menos 30 especies de cetáceos residentes y que migran por el Golfo de California o Mar de Cortés, bautizado por el oceanógrafo francés Jacques Cousteau, como el “Acuario del Mundo”, debido a su gran riqueza biológica.
De acuerdo con el estudio “Impacto del Proyecto Saguaro Energía GNL a los cetáceos del Golfo de California”, realizado por el Programa de Investigación de Mamíferos Marinos (PRIMMA), de la Universidad Autónoma de Baja California Sur (UABCS), en esta región del noroeste del país abundan especies protegidas que estarían en grave riesgo como el rorcual común, rorcual tropical, ballena azul, ballena jorobada, cachalote, orca, delfín de risso y calderón aletas cortas.
El Proyecto Saguaro de la empresa Mexico Pacific, incluye la construcción y operación de un gasoducto de 800 kilómetros, que atravesaría la Sierra Madre desde Texas hasta los estados de Sinaloa y Sonora; una terminal de Gas Natural Licuado en Puerto Libertad, Sonora, 70 veces del tamaño del Estadio Azteca y lo más peligroso, la transportación del combustible en buques de más de 300 metros de largo, del Golfo de California a los mercados de Asia.
La investigación realizada por los doctores Jorge Urbán, Lorena Viloria y Pamela Martínez, alerta sobre fatales colisiones y el impacto del ruido generado por las obras de construcción y la operación de estos enormes barcos.
Las afectaciones a estas especies ocurrirán en toda la ruta de los buques y en particular en la zona de las Grandes Islas. La población residente del rorcual común, considerada como indicadora de la salud del Golfo de California, será la más afectada con el desarrollo de este proyecto”, alertaron.
El estudio también señala que cualquier alteración en los patrones de distribución y disminución de la abundancia de las especies objeto del turismo, afectaría negativamente a la economía de las comunidades costeras, ya que de acuerdo con la propia Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), la derrama económica generada en la última década por los visitantes es de más de mil 126 millones de pesos para la ballena jorobada y de 18.4 millones de pesos para la ballena azul.
Los científicos concluyeron que las medidas de mitigación propuestas por Mexico Pacific en la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) del 2006 y el Programa de Protección y Conservación de la Biodiversidad publicado en 2023, “son insuficientes para garantizar la protección de mamíferos marinos en el Golfo de California”.
Agregaron que la MIA no contempla ninguna alternativa para evitar la ocurrencia de accidentes o colisiones, “lo único que menciona es seguir un principio precautorio como la disminución de la velocidad de los buques cuando transiten por zonas críticas”, pero no aporta detalles sobre el límite en kilómetros o nudos por hora.
“Además, la MIA sólo reconoce la región de las Grandes Islas y el Área Prioritaria Marina Guaymas como zonas críticas, excluyendo los posibles impactos por el tránsito de buques en el resto del Golfo de California.
El Programa de Protección y Conservación de la Biodiversidad, muestra deficiencias similares a las de la MIA. Por ejemplo, no aborda adecuadamente el radio de dispersión acústica del ruido que el proyecto emitirá, únicamente toma en cuenta el área de las Grandes Islas y las medidas de protección que propone se basan en información errónea.
Mientras tanto, estudios biológicos muestran que las regiones afectadas excluidas, como la zona al norte de Puerto Libertad, la región centro y el corredor Loreto-Los Cabos, también son de gran importancia para el bienestar de la vida marina y para los cetáceos, tanto residentes como migratorios”, manifestaron.