Decomisan más de mil litros de combustible en Jalisco durante operativo marítimo; detienen a tres tripulantes.
La Secretaría de Marina (Semar) llevó a cabo un operativo en alta mar que resultó en el aseguramiento de una embarcación menor que transportaba combustible presuntamente destinado al crimen organizado. El incidente ocurrió a 120 millas náuticas (aproximadamente 222 km) al sureste de Puerto Vallarta, Jalisco, durante una operación de vigilancia y control.
El personal naval detectó una embarcación menor equipada con dos motores fuera de borda. Al percatarse de la presencia de las autoridades, los tres tripulantes intentaron deshacerse de la carga, arrojando bidones al mar, lo que llevó a su inmediata intercepción.
Tras la acción, la Semar confiscó un total de 29 bidones que contenían cerca de 1,200 litros de combustible, además de la propia embarcación. Los tres tripulantes fueron detenidos y puestos a disposición de las autoridades correspondientes para continuar con las investigaciones.
Según las primeras indagatorias, se presume que el combustible sería utilizado para abastecer a un grupo criminal que opera en la región. Esta hipótesis toma fuerza debido al intento de los sospechosos de deshacerse de los bidones antes de ser alcanzados por las fuerzas navales.
El decomiso forma parte de las acciones estratégicas de la Secretaría de Marina para combatir las actividades ilícitas en aguas nacionales, incluyendo el tráfico de combustible, considerado un delito recurrente vinculado al crimen organizado. La localización del operativo subraya la importancia del patrullaje constante en las costas del Pacífico, particularmente en zonas cercanas a Jalisco, un estado con alta incidencia de actividades delictivas relacionadas con grupos criminales.
La Semar reiteró su compromiso con la seguridad y la vigilancia marítima e hizo un llamado a la ciudadanía para que denuncie cualquier actividad sospechosa relacionada con el tráfico de combustibles u otros delitos. Las denuncias pueden realizarse a través de los canales oficiales, garantizando la confidencialidad de los informantes.
Las investigaciones continuarán para determinar la procedencia y el destino del combustible, así como los vínculos de los detenidos con organizaciones criminales.
