La presidenta aseguró que el Gobierno federal trabaja diariamente para construir la paz y proteger a las familias sinaloenses.
En la conferencia matutina desde Palacio Nacional, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, expresó su solidaridad con el pueblo de Sinaloa ante los más de cuatro meses de violencia generados por las disputas internas del narcotráfico, particularmente tras la detención del narcotraficante Ismael “Mayo” Zambada en Estados Unidos.
“Lamentamos profundamente la situación que atraviesan, pero no solo es una preocupación, sino una ocupación permanente de este Gobierno. Llegaron más refuerzos y estamos trabajando para garantizar la atención a las causas y promover la cero impunidad”, afirmó Sheinbaum.
Las declaraciones de Sheinbaum ocurren en medio de protestas multitudinarias en Culiacán, donde miles de personas, vestidas de blanco, marcharon para exigir un alto a la violencia y la renuncia del gobernador Rubén Rocha Moya. Durante la manifestación, los participantes quemaron una piñata con la figura del mandatario estatal, acusándolo de posibles vínculos con el narcotráfico.
El asesinato de dos menores, Gael y Alexander, de 9 y 12 años, junto con su padre el pasado 19 de enero, fue el detonante de estas movilizaciones. Desde el inicio de la pugna interna del Cártel de Sinaloa, el 9 de septiembre de 2024, el estado ha registrado más de 600 homicidios.
La presidenta subrayó que el Gobierno federal no intervendrá en la destitución o imposición de gobernadores, dejando claro que el enfoque está en apoyar a las familias y restablecer la paz en la región.
“Nuestra labor es proteger a las familias y trabajar por la paz. Antes había columnas en las que el presidente decidía quién entraba o salía, pero ese no es nuestro papel. Estamos para apoyar a todas las regiones del país”, enfatizó.
Sheinbaum también destacó que la violencia en Sinaloa se intensificó tras la detención de Zambada y señaló que, en cuanto se estabilice la relación con el Gobierno de Donald Trump, buscará explicaciones sobre este hecho y su impacto en la región.
“Cuando se asiente bien la relación con el Gobierno estadounidense, insistiremos en obtener información sobre esta detención, que originó esta lamentable ola de violencia en Sinaloa”, concluyó.
Mientras tanto, el Gobierno federal seguirá desplegando estrategias para garantizar la seguridad y restablecer la tranquilidad en el estado.
