Operativo federal en Mazatlán permite la captura de cinco presuntos generadores de violencia, el rescate de dos personas secuestradas y el aseguramiento de armas, municiones y vehículos blindados.
En un operativo conjunto entre fuerzas federales y locales, cinco personas fueron detenidas en Mazatlán, Sinaloa, luego de ser identificadas como presuntos generadores de violencia, en una acción que dejó también el rescate de dos individuos privados de su libertad y el aseguramiento de un importante arsenal. La operación, que fue encabezada por la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), bajo la dirección de su titular, Omar García Harfuch, forma parte de los esfuerzos para contener la creciente ola de violencia en el estado.
La intervención se llevó a cabo, cuando agentes de diversas dependencias federales, junto con fuerzas locales, realizaron una inspección de seguridad en un predio ubicado en la localidad de Tecomate de la Noria, al norte de Mazatlán. Durante la inspección, los efectivos federales observaron a varios sujetos armados, lo que obligó a las autoridades a intervenir para evitar que la situación escalara y pusiera en riesgo la seguridad de la población local.
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El resultado de la operación fue la detención de cinco hombres, quienes se encontraban en posesión de 15 armas largas, 110 cargadores, 6,951 cartuchos, un tubo lanzagranadas, tres granadas, equipos de radiocomunicación, y una bolsa con mariguana. Además, en el lugar fueron encontrados cuatro paquetes con polvo blanco, cuya sustancia está siendo analizada, así como seis vehículos, tres de los cuales contaban con blindaje artesanal.
De manera adicional, la operación permitió el rescate de dos personas secuestradas, quienes fueron encontradas en el predio y recibieron atención médica inmediata. Las víctimas fueron auxiliadas por las autoridades y orientadas para presentar las denuncias correspondientes ante el Ministerio Público. En un comunicado, las autoridades federales confirmaron que la intervención no dejó víctimas civiles ni personales entre los efectivos que participaron.
García Harfuch destacó la relevancia de la acción como parte de una serie de operativos encaminados a desarticular las redes de criminalidad que operan en el estado de Sinaloa, donde los enfrentamientos entre grupos del crimen organizado, particularmente facciones del Cártel de Sinaloa, se han intensificado en las últimas semanas. La violencia en la entidad ha aumentado después de la detención de Ismael “Mayo” Zambada, uno de los líderes históricos del cártel, en un aeropuerto de Nuevo México, Estados Unidos, el pasado 25 de julio. Esta captura desató una serie de pugnas internas dentro del cártel, lo que ha generado un clima de inseguridad en diversas regiones de Sinaloa.
El Gobierno Federal ha reiterado su compromiso en la lucha contra la delincuencia organizada, asegurando que no cederá ante las presiones de los grupos delictivos. “Estamos aquí para garantizar la seguridad de los ciudadanos y para desmantelar las estructuras que alimentan la violencia. Este operativo demuestra que no hay impunidad, no importa la magnitud de los actores involucrados”, declaró García Harfuch durante su conferencia de prensa.
Las autoridades federales también informaron que los detenidos fueron informados de sus derechos constitucionales y, junto con lo asegurado, fueron puestos a disposición del Agente del Ministerio Público, quien determinará su situación jurídica en las próximas horas. Las investigaciones continúan con el objetivo de identificar y desmantelar las organizaciones delictivas operativas en la región.
El operativo en Mazatlán forma parte de una serie de medidas y estrategias que se han implementado en los últimos meses para contrarrestar la violencia derivada de la lucha interna entre facciones del cártel, que ha afectado a diversas áreas del estado. Aunque la violencia sigue siendo uno de los retos más grandes para las autoridades de Sinaloa y del país, este tipo de operativos demuestran el esfuerzo continuo de las fuerzas de seguridad en la región para llevar a cabo un combate efectivo al crimen organizado.
La ciudadanía de Sinaloa y, en particular, la de Mazatlán, se mantiene expectante ante el curso de las investigaciones y el impacto que estos operativos puedan tener en la estabilidad de la región. Las autoridades continúan trabajando de manera coordinada para garantizar que las acciones delictivas no queden impunes y para devolver la paz a las comunidades afectadas.
