Disminuyen solicitudes de asilo en México, pero la migración irregular persiste

La Comar reporta una caída del 44% en solicitudes de asilo en 2024, pero la saturación migratoria sigue afectando la frontera sur del país.

Las solicitudes de asilo en México disminuyeron considerablemente en 2024, con 78 mil 975 peticiones, lo que representa una caída cercana al 44 % en comparación con el récord histórico de 140 mil 720 casos registrados en 2023. A pesar de esta disminución, la migración irregular continúa alcanzando cifras históricas, lo que mantiene a la frontera sur del país en una situación de saturación constante.

Según datos de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), Honduras superó a Haití como el principal país de origen de los solicitantes de asilo, con un total de 27 mil 888 personas. Cuba, Haití, El Salvador, Venezuela, Guatemala, Colombia, Ecuador, Nicaragua y Chile completan la lista de los países con más migrantes que buscan refugio en México.

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A pesar de que la cantidad de solicitudes ha bajado, la Comar solo ha logrado resolver menos de la mitad de los casos, con un total de 33 mil 844 resoluciones, de las cuales el 74 % fueron aprobadas. Esta situación resalta el retraso en el sistema de atención, lo que ha generado críticas por parte de organizaciones de derechos humanos y activistas.

Aunque las solicitudes de asilo han disminuido, la migración irregular sigue en aumento. La Unidad de Política Migratoria detectó que más de 925 mil personas se encontraban en situación de migración irregular de enero a agosto de 2024, superando cualquier cifra registrada en años anteriores.

Tapachula, la principal ciudad de la frontera sur, continúa siendo el centro de concentración de migrantes, con más de 50 mil solicitudes de asilo durante el año. Esta saturación genera largas filas y tiempos de espera para los solicitantes. Héctor Martínez Estrada, activista del Colectivo de Defensores de Derechos Humanos en la Frontera Sur, señaló que muchos migrantes eligen no acudir a la Comar debido a la lentitud de los trámites, ya que los periodos de espera son largos y no les permiten avanzar rápidamente hacia el norte.

A pesar de la baja en solicitudes, muchos migrantes siguen buscando otras vías para regularizar su situación. Algunos recurren a métodos alternativos, como la aplicación ‘CBP One’ de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos o las caravanas migrantes, para llegar a su destino sin pasar por el proceso de asilo en México.

El defensor de migrantes denunció que la lentitud del proceso sigue siendo un problema, lo que genera frustración en quienes esperan una respuesta. La ley establece un plazo de 45 días para la respuesta, pero el tiempo de espera suele ser mucho mayor.

Mientras tanto, algunos migrantes, como Melvi Villasana Pérez, migrante venezolana, aseguran que la gente sigue llegando a la Comar con la esperanza de quedarse en México, atraídos por las oportunidades laborales. Villasana Pérez, quien reside cerca de la oficina de la Comar en Tapachula, señaló que la demanda de asilo sigue siendo alta, con migrantes de diversas nacionalidades que buscan refugio.

Por otro lado, Miguel, un migrante colombiano, explicó que la rapidez de los trámites en la Comar es uno de los motivos por los cuales muchos eligen solicitar asilo en México en lugar de continuar hacia Estados Unidos. En su caso, elige quedarse en México debido a las oportunidades económicas y la estabilidad del país, que compite con economías como las de Estados Unidos y China.

A pesar de la reducción en las solicitudes, el sistema migratorio mexicano sigue enfrentando retos, especialmente con la migración irregular y la presión sobre las instituciones encargadas de atender a los solicitantes de asilo.