Aunque la medida ha generado debate, para muchos consumidores representa una herramienta de defensa frente a los abusos en el mercado
La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) ha iniciado una ofensiva directa contra las gasolineras que exceden los precios sugeridos para la venta de combustibles. Este jueves, se colocó la primera lona de advertencia con la leyenda “No cargues aquí, se vuelan la barda con los precios” en una estación de la marca Mobil en Monterrey, Nuevo León.
El titular de la Profeco, Iván Escalante Ruiz, supervisó personalmente la colocación del aviso en la gasolinera ubicada en la colonia Colinas de San Jerónimo, donde la gasolina regular alcanzaba los $26.30 por litro, muy por encima del rango sugerido de entre $23 y $24 pesos por litro establecido por la presidenta Claudia Sheinbaum.
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“Los precios altos no son justificables. Si otras gasolineras respetan este rango, no hay motivo para que algunos establecimientos eleven sus precios injustificadamente”, señaló Escalante. Tras la advertencia, la gasolinera redujo sus precios a $25.99 en menos de 24 horas, demostrando que el ajuste era posible.
Una campaña nacional para frenar los abusos
La estrategia forma parte de un programa más amplio para alertar a los consumidores sobre las estaciones de servicio que incumplen con los lineamientos de precio justo. Se prevé que lonas similares se coloquen en otras estaciones de Durango y León, Guanajuato, como parte de un monitoreo nacional que incluye tanto gasolina regular como diésel.
Escalante enfatizó que esta acción no implica la interrupción de las operaciones comerciales de las gasolineras, pero sí busca exhibir a los negocios que, mediante altos márgenes de ganancia, afectan el bolsillo de los consumidores. Estas medidas, aseguró, están respaldadas por el Artículo 25 Bis Fracción V de la Ley Federal de Protección al Consumidor.
Controversia legal
Sin embargo, no todos ven con buenos ojos la campaña. Ricardo Reynaga, abogado especializado en el sector gasolinero, calificó las lonas como una medida ilegal e inconstitucional. Según Reynaga, la colocación de estos avisos sin un proceso administrativo previo ni una orden formal de una autoridad competente podría ser impugnada legalmente.
“El impacto en los consumidores es significativo, y debe garantizarse el derecho a la defensa de las estaciones de servicio antes de cualquier acción pública que afecte su reputación”, afirmó el abogado, sugiriendo que la Profeco debería priorizar el diálogo antes de recurrir a medidas coercitivas.
Un precedente en la política de precios
Desde la liberalización de los precios de los combustibles durante el sexenio de Enrique Peña Nieto, la Profeco ha asumido el papel de vigilante del mercado. Con estas acciones, la dependencia busca establecer un precedente para evitar que los márgenes de ganancia de los gasolineros se disparen en perjuicio del consumidor.