El vuelo 7C2216 de Jeju Air sufrió un accidente en el aeropuerto de Muan, convirtiéndose en el peor desastre aéreo en la historia de Corea del Sur.
Este domingo, Corea del Sur vivió su peor tragedia aérea cuando el vuelo 7C2216 de la aerolínea Jeju Air, procedente de Bangkok, se estrelló en el aeropuerto de Muan. El accidente dejó un saldo devastador de 179 personas fallecidas y solo dos sobrevivientes, según confirmaron los bomberos tras casi 12 horas de intensas labores de búsqueda y rescate.
El siniestro ocurrió a las 9:03 hora local (00:07 GMT), cuando el Boeing 737-800 intentaba aterrizar. La aeronave se salió de la pista y chocó violentamente contra un muro perimetral del aeropuerto. Las autoridades han señalado que el avión no activó el tren de aterrizaje ni otros sistemas de frenado, lo que habría contribuido a la tragedia.
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Minutos antes del aterrizaje, la torre de control había emitido una alerta por colisión aviaria tras detectar aves en la trayectoria de la aeronave. Según los reportes preliminares, el motor derecho del avión pudo haber sufrido daños por impacto con un ave. Cuatro minutos antes del accidente, el capitán emitió una señal de socorro (“mayday”), pero no logró evitar el desastre.
De los 181 ocupantes del vuelo, solo dos personas sobrevivieron: ambas auxiliares de vuelo que estaban situadas en la cola del avión. Entre los pasajeros, se encontraban 173 ciudadanos surcoreanos y dos tailandeses, además de los seis miembros de la tripulación, que incluían al piloto y copiloto.
Hasta el momento, se han identificado 77 de las víctimas mortales, mientras que las labores de identificación continúan para los demás.
Este desastre supera al ocurrido en abril de 2002, cuando un Boeing 767-200 de Air China se estrelló en un monte durante su aproximación al aeropuerto de Gimhae, en Busan, dejando 129 muertos y 37 sobrevivientes.
El aeropuerto de Muan, ubicado a 290 kilómetros al suroeste de Seúl, permanece cerrado mientras se realizan las investigaciones. Peritos surcoreanos y representantes de Boeing han iniciado los análisis para determinar las causas exactas del accidente, en el que el impacto aviario y posibles fallos técnicos son las principales hipótesis.
El gobierno surcoreano ha declarado un periodo de duelo nacional para rendir homenaje a las víctimas y apoyar a las familias afectadas. “Estamos comprometidos a descubrir la verdad detrás de esta tragedia y a implementar medidas que garanticen que algo así nunca vuelva a ocurrir”, señaló el primer ministro en un comunicado oficial.
La magnitud de esta tragedia ha sacudido no solo a Corea del Sur, sino a toda la comunidad internacional, que envía condolencias y solidaridad en estos momentos difíciles.
