Dos participantes de la regata Sídney-Hobart fallecieron tras accidentes con la botavara de su barco en condiciones marítimas difíciles.
Dos participantes de la regata Sídney-Hobart murieron en accidentes separados durante la última edición del evento, celebrada entre las ciudades australianas de Sídney y Hobart.
Los trágicos sucesos ocurrieron en la noche del jueves y la madrugada del viernes, mientras los barcos navegaban en condiciones de fuertes vientos. Según el comodoro del Club de Yates de Crucero de Australia, David Jacobs, ambos accidentes involucraron la botavara, una parte del barco que sujeta la vela al mástil y que se movía violentamente bajo esas difíciles condiciones.
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El superintendente de la región de Nueva Gales del Sur, Joe McNulty, precisó que las víctimas, de 55 y 65 años, fallecieron mientras realizaban cambios de velas. Además, otro tripulante resultó herido con una fractura en un hombro durante el segundo accidente. Las autoridades retuvieron ambos barcos para investigar los incidentes. También se reportó que un tercer participante fue rescatado con vida tras caer por la borda.
El primer ministro australiano, Anthony Albanese, expresó sus condolencias a las familias de las víctimas, recordando que la regata es una tradición nacional y lamentando la tragedia ocurrida en lo que debía ser una celebración de la vela. La regata, que comenzó en 1945, cubre un recorrido de 630 millas náuticas (1,166 kilómetros) entre Sídney y Hobart.
