El artero crimen contra el edil de Tancanhuitz, Jesús Eduardo Franco, desnuda la podredumbre que viven prácticamente todos los municipios “democráticamente” elegidos, condena Juan Felipe Cisneros
Para ciudadanía indígena en la Huasteca desde hace tiempo se vive en el infierno, no sólo por las altas temperaturas que le caracterizan a la región por su clima tropical húmedo, sino por la impunidad, inseguridad y falta de servicios.
El activista Juan Felipe Cisneros recordó que, recientemente se cometió un artero crimen contra el edil de Tancanhuitz, Jesús Eduardo Franco, que sólo desnuda la podredumbre que viven prácticamente todos los municipios “democráticamente” elegidos.
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“La autoridad estatal ha calificado el crimen como “una riña entre particulares, entre misma gente de Cabildo” y pidió “a la gente no politizar el tema, porque si bien son de un partido o de otro, no es un tema de partidos, es un tema de seguridad pública”.
Podemos entender el intento político de minimizar el sangriento hecho en el que perdieron la vida tres personas, pero el hecho no es otra cosa que la expresión de una crisis de legitimidad, gobernabilidad y de seguridad”, aseguró.
Indicó que, por esto, piden que, la Huasteca Potosina que es una región predominantemente indígena, se les dé el reconocimiento de sus derechos político-electorales y puedan elegir a sus gobernantes por usos y costumbres, ya que el actual sistema de partidos causa dificultades a la gobernabilidad.
Puntualizó que, la población indígena se asienta tradicionalmente en 23 municipios, en 18 de estos, donde representan más del 50 por ciento de la población total. En 13 de ellos la población indígena representa más del 70 por ciento de la población total, dichos municipios son: San Antonio (99.15 %), Tanlajas (97.44%), Coxcatlán (92.68%), Aquismón (92.41%), Huehuetlán (90.34%), Axtla de Terrazas (89.78%), Tancanhuitz (89.52%), Matlapa (89.18%), Tampamolon de Corona (87.13%), Tampacán (83.88%), San martín Chalchicuautla (82.28%), Tamazunchale (82.07%), Santa Catarina (79.75%). “En la perspectiva estatal los indigenas son minorías, pero en la perspectiva regional de la Huasteca, éstos son la mayoría”.
Reprobó que, en estos municipios donde son mayoría las comunidades indígenas, comúnmente son gobernados por personas no indígenas y bajo un sistema electoral ajeno a sus sistemas normativos y formas de gobierno indígena reconocidos en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
“Actualmente en los procesos electorales en regiones indígenas, se mantiene la figura del partido político en una sociedad indígena a la que le es incompatible dicha personalidad para elegir a un representante a un cargo popular. Esta figura no es correspondiente a la costumbre indígena (sistema normativo), tampoco contribuye a procurar composición pluricultural y multiétnica de la Nación que reconoce la Constitución”, aseveró.
