Crisis institucional se agrava tras la inhabilitación histórica.
El Parlamento surcoreano aprobó este viernes la destitución del primer ministro y presidente interino, Han Duck-soo, en una decisión sin precedentes que profundiza la crisis institucional desatada tras la declaración de la ley marcial el pasado 3 de diciembre.
Con 192 votos a favor, la oposición, liderada por el Partido Democrático (PD), logró inhabilitar a Han, quien había asumido el cargo de forma interina tras la destitución de Yoon Suk-yeol. El ministro de Finanzas, Choi Sang-mok, asumirá provisionalmente el mando del Gobierno.
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El PD impulsó la moción luego de que Han se negara a aprobar los nombramientos de nuevos jueces para el Tribunal Constitucional, complicando la resolución de la destitución de Yoon, que está bajo juicio en el Constitucional.
El Partido del Poder Popular (PPP), formación gobernante, presentó una solicitud para anular la decisión ante el Tribunal Constitucional, argumentando que se requería una mayoría calificada para cesar al presidente interino.
El PD, sin embargo, sostiene que la moción cumple con la ley vigente y promete seguir presionando al Gobierno para renovar el Constitucional y garantizar investigaciones contra Yoon y su esposa.
Corea del Sur enfrenta ahora un panorama de mayor incertidumbre, con una oposición decidida a convocar elecciones presidenciales anticipadas y un Gobierno en funciones debilitado.
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