El triunfo de 33-36 cambia el panorama en la NFC Este y elimina a Dallas
En un partido lleno de emociones, los Washington Commanders lograron una histórica victoria por 33-36 sobre los Philadelphia Eagles, un triunfo que les coloca con un récord de 10-5, su mejor marca desde 1991, año en que ganaron su último Super Bowl. Este resultado también dejó a los Dallas Cowboys fuera de la contienda por los playoffs, extendiendo su sequía de 29 años sin conseguir el título más importante de la NFL.
La clave del triunfo fue la heroica actuación de Jayden Daniels, quien, después de una intercepción en la posesión anterior, condujo a Washington a un último minuto inolvidable. Daniels conectó un pase de 57 yardas con Jamison Crowder en el último segundo del partido para culminar una remontada impresionante, ya que Washington había estado abajo por 14 puntos tanto al inicio del último cuarto como a los siete minutos de juego.
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Sin embargo, la jugada más crucial de la tarde fue la conmoción sufrida por Jalen Hurts, el quarterback estrella de los Eagles. Hurts sufrió un golpe en la cabeza durante un acarreo de 13 yardas al final del primer cuarto, lo que obligó a su salida para una evaluación médica. Aunque Kenny Pickett tomó el relevo y lanzó un pase de touchdown a AJ Brown, los Eagles no pudieron mantener el ritmo sin su líder y fueron superados por la remontada de los Commanders.
Philadelphia parecía tener el control del partido, ya que llegaron a estar adelante 27-14 al inicio del último cuarto, pero Daniels y los Commanders protagonizaron una actuación mágica. Washington logró frenar la racha de 10 victorias consecutivas de los Eagles, quienes también vieron cómo sus aspiraciones de asegurar la NFC Este y el primer lugar de la conferencia se complicaban aún más con la victoria de Detroit sobre los Chicago Bears.