La primera mujer presidenta de México logra reconocimiento global y consolida avances históricos en paridad de género y liderazgo político.
Claudia Sheinbaum cerrará este año como un ícono histórico en México y el mundo. Desde que asumió la Presidencia el 1 de octubre de 2024, se ha consolidado como una líder destacada a nivel internacional, al tiempo que impulsa importantes cambios en política interna, equidad de género y relaciones exteriores.
Sheinbaum, la primera mujer en ocupar la presidencia de México, ha sido incluida en diversas listas de reconocimiento mundial. Según la revista Forbes, debutó en el cuarto puesto de las 100 mujeres más poderosas del mundo, destacando su capacidad para “sobrevivir a la reacción global contra los partidos en el poder” y liderar una de las economías más grandes de América Latina, con un PIB de 1.7 billones de dólares.
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Forbes también subrayó su habilidad política para enfrentarse al presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, en cuestiones de comercio, posicionándose como una de las voces más críticas hacia sus amenazas arancelarias. Este liderazgo ha reforzado su papel en el escenario internacional y la ha convertido en una figura influyente, incluso en un panorama global donde el número de mujeres en cargos de liderazgo político ha disminuido drásticamente en los últimos años.
Además de Forbes, Sheinbaum fue nombrada una de las 25 mujeres más influyentes del mundo por el diario Financial Times y quedó entre las 10 finalistas a “Persona del Año” de la revista Time. Aunque este último reconocimiento fue otorgado al presidente electo Trump, la revista destacó su lucha por la justicia social y su enfoque en las políticas para las personas más vulnerables.
A nivel interno, Sheinbaum ha marcado un precedente con reformas que impulsan la paridad de género. Uno de los legados más destacados de su gobierno es la incorporación del término “presidenta” en la Constitución, una iniciativa que simboliza su compromiso con el reconocimiento y empoderamiento de las mujeres en todos los niveles.
“Solo lo que se nombra existe”, declaró Sheinbaum durante un evento, mientras celebraba que instituciones como las Fuerzas Armadas comenzaran a utilizar términos como “comandanta”.
Hija de científicos y con raíces judías, Claudia Sheinbaum ha roto múltiples barreras a lo largo de su carrera. En 1995, se convirtió en la primera mujer en obtener un doctorado en Ingeniería Energética por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), tras estudiar Física e Ingeniería de la Energía.
Inspirada por los movimientos sociales de los años sesenta y ochenta, su activismo estudiantil la llevó a una carrera política que comenzó en 2000 como secretaria de Medio Ambiente en la Ciudad de México. En 2018, hizo historia al convertirse en la primera jefa de Gobierno de la capital mexicana, cargo que dejó en 2023 para contender por la Presidencia.
Pese a los logros, Sheinbaum ha señalado que el mérito no es solo individual, sino de las mujeres que allanaron el camino antes que ella. “No me gusta el término ‘romper techos de cristal’, porque parece que es el esfuerzo de una sola mujer, y esto es colectivo”, afirmó.
Sheinbaum ha asumido su cargo con grandes retos por delante, desde el fortalecimiento de la economía hasta el combate a la desigualdad. En los primeros meses de su mandato, enfrentó tensiones con Estados Unidos por posibles aranceles, mientras busca consolidar políticas de transformación social que continúen el legado de su predecesor, Andrés Manuel López Obrador.
“Soy madre, abuela, científica y mujer de fe. Y, a partir de hoy, por voluntad del pueblo de México, la presidenta”, expresó al asumir el cargo, marcando el inicio de un periodo que promete ser transformador para México y las generaciones venideras.
Claudia Sheinbaum se despide de 2024 con la mirada puesta en un futuro donde la igualdad, el desarrollo sostenible y la justicia social se mantengan como pilares fundamentales de su gobierno.
