Pakistán rechaza acusaciones de Estados Unidos sobre su programa de misiles balísticos

El Ministerio de Relaciones Exteriores de Pakistán calificó de “infundadas” y “carentes de racionalidad” las afirmaciones de un alto funcionario estadounidense sobre una posible amenaza a Estados Unidos.

Pakistán rechaza advertencias desde EU por su programa de misiles

El Ministerio de Relaciones Exteriores de Pakistán rechazó el sábado las afirmaciones de un alto funcionario estadounidense, que sugirió que el desarrollo de misiles balísticos de largo alcance por parte del país podría representar una amenaza para Estados Unidos. El viceconsejero estadounidense de Seguridad Nacional, Jon Finer, había declarado más temprano en la semana que Pakistán estaba desarrollando misiles balísticos de largo alcance que podrían constituir una “amenaza emergente”.

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Estas declaraciones se produjeron un día después de que Estados Unidos anunciara nuevas sanciones relacionadas con el programa de misiles de Pakistán, lo que subraya la creciente tensión en las relaciones entre ambos países desde la retirada de las tropas estadounidenses de Afganistán en 2021.

En respuesta, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Pakistán calificó las afirmaciones de Finer como “infundadas” y “carentes de racionalidad”. En un comunicado, el ministerio expresó que tales acusaciones carecen de fundamento y no tienen en cuenta la historia de las relaciones entre ambos países.

Pakistán defendió su programa de misiles, destacando que sus capacidades estratégicas están diseñadas únicamente para defender su soberanía y garantizar la estabilidad regional. “No deben percibirse como una amenaza para ningún país”, señaló el ministerio.

El gobierno de Pakistán también subrayó la larga historia de cooperación con Estados Unidos, especialmente en la lucha contra el terrorismo, y reafirmó su compromiso de seguir colaborando constructivamente en diversas cuestiones, incluidas la seguridad y la estabilidad regional.

La polémica refleja el deterioro de los lazos entre ambos países, que habían sido estrechos en el pasado, pero que han experimentado tensiones significativas desde la retirada de las fuerzas estadounidenses de Afganistán, un tema que sigue siendo fuente de fricciones diplomáticas entre Washington e Islamabad.