Durante la audiencia general, el Papa destacó a los ancianos como “un don de Dios” y pidió que no estén solos en las fiestas navideñas.
El papa Francisco pidió este miércoles, durante su audiencia general en el Aula Pablo VI del Vaticano, que los adultos mayores no sean dejados solos durante las celebraciones navideñas. Reflexionando sobre la genealogía de Jesús, el Papa destacó la importancia de los ancianos como una parte vital de la familia y la sociedad.
“El don de los ancianos es un regalo de Dios que debemos agradecer y cuidar. No permitamos que estén solos durante las próximas fiestas de Navidad”, expresó el pontífice, haciendo un especial llamado a las familias para que se aseguren de que los mayores estén acompañados y cuidados en esta época del año.
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Además, instó a las familias a incluir un Nacimiento en sus hogares como un recordatorio de la llegada de Jesús, reforzando así la tradición espiritual y cultural de la Navidad. “Este elemento importante de nuestra espiritualidad es un modo sugestivo de recordar a Jesús que vino a habitar entre nosotros”, señaló.
El papa Francisco también reiteró su llamado por la paz mundial, pidiendo oraciones por los pueblos afectados por la guerra, especialmente en Palestina, Israel, Ucrania y Myanmar. “La guerra, no lo olvidemos, siempre es una derrota, siempre”, afirmó, pidiendo al “Príncipe de la Paz” que conceda la gracia de la paz en el mundo.