Las piezas, que datan de diversos periodos mesoamericanos, fueron recuperadas tras años de investigaciones y se consideran monumentos arqueológicos muebles propiedad de la nación mexicana.
El gobierno italiano devolvió a México 101 piezas arqueológicas de gran relevancia histórica y cultural en una ceremonia simbólica que marca la mayor restitución realizada hasta el momento. La entrega tuvo lugar este miércoles 18 de diciembre en Italia, con la presencia de importantes figuras como el embajador de México en Italia, Carlos García de Alba, el comandante de los Carabineros de Tutela Patrimonio Cultural, Francesco Gargaro, y representantes de los gobiernos de ambos países.
Estas piezas, cuyo valor económico global se estima en varias decenas de miles de euros, forman parte del patrimonio cultural mexicano y abarcan una amplia cronología. Desde la cultura teotihuacana de la Meseta Central hasta el periodo zapoteca del clásico mesoamericano (150-650 d.C.), las piezas incluyen artefactos del preclásico medio (900-300 a.C.) y del México-Azteca de los siglos XIV al XVI.
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Entre los objetos devueltos se encuentran miniaturas de arcilla, estatuillas antropomorfas y zoomorfas de piedra dura, jarrones de cerámica negra con efigies, y una pieza única que representa a Tlaloc, deidad de la lluvia de la cultura tolteca-maya (900-1200 d.C.). También destacan una figura masculina de cerámica de la cultura olmeca y una “pintadera” triangular con una escena de sacrificio humano, considerada una joya de la cultura azteca.
La restitución fue el resultado de una serie de investigaciones realizadas en Roma, Udine, Perugia, Ancona y Cosenza. En algunos casos, las piezas fueron incautadas tras denuncias por intento de robo, como en Ancona, mientras que otras fueron descubiertas durante controles aduaneros en el aeropuerto de Reggio Calabria.
Por ejemplo, en Perugia, las autoridades activaron una investigación tras detectar hallazgos arqueológicos mexicanos a la venta en mercados en línea. En Udine, las piezas pertenecían a un coleccionista que afirmó haberlas adquirido con intenciones filantrópicas en mercados del Véneto.
El Instituto Nacional de Antropología e Historia de México (INAH) certificó la autenticidad y procedencia de las piezas antes de su repatriación, confirmando que se trataba de bienes culturales robados del territorio mexicano.
Durante la ceremonia de devolución, el subsecretario de Asuntos Exteriores de Italia, Giorgio Silli, destacó la importancia de estas acciones para reforzar los lazos entre ambos países: “Gracias a la cultura, los países pueden ser amigos. Estas devoluciones confirman nuestra amistad con México”.
Por su parte, María Teresa Mercado, subsecretaria de Asuntos Exteriores de México, señaló que esta devolución es de suma relevancia para el país: “Estas 101 piezas representan nuestra identidad, patrimonio histórico y cultural. Creemos que es justo que regresen a México; es una cuestión de justicia”.
El gobierno mexicano ha intensificado esfuerzos a través de sus embajadas para recuperar bienes culturales en el extranjero, combatiendo el tráfico ilícito de patrimonio arqueológico. Estas piezas, consideradas monumentos arqueológicos muebles propiedad de la nación, serán resguardadas y exhibidas para promover el conocimiento y la preservación de la riqueza cultural de México.
Con esta octava devolución por parte de Italia, México da un paso importante en la lucha contra el saqueo de su patrimonio cultural, demostrando el compromiso de ambos países por proteger y respetar su herencia histórica.
