Cómo conseguir la configuración perfecta para el trabajo remoto

Trabajar a distancia puede ser una bendición, y para muchos, no es sólo una preferencia – es un requisito. Aunque el trabajo desde casa puede ser una gran oportunidad, necesitas la configuración adecuada para ser siempre productivo. Si necesitas ideas, aquí tienes algunas de las mejores maneras de prepararte para el éxito.

1. Invierte en un portátil de alta calidad

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Cuando trabajas a distancia, lo más probable es que dependas de un portátil para realizar tu trabajo. Si tiene un presupuesto limitado, es tentador comprar un portátil basándose en el precio, pero no cometa este error. Invierte en un computadora portátil de alta calidad que sepas que durará al menos 3-4 años y que tendrá suficiente RAM y espacio en disco para satisfacer todas tus necesidades.

No hace falta que te gastes miles de dólares en un portátil nuevo, pero asegúrate de adquirir uno que tenga un procesador rápido y una tarjeta gráfica decente. Los portátiles baratos suelen estar fabricados con componentes baratos, y la experiencia de usuario puede ser frustrante.

2. Consigue un escritorio ajustable

Tener un escritorio ajustable te da la posibilidad de sentarte o levantarte según lo necesites. Ni estar sentado ni de pie todo el día por trabajo es saludable, y es bueno tener la opción de cambiar las cosas a medida que avanza el día. Un escritorio ajustable también hace que sea fácil de usar cualquier tipo de silla, incluyendo una silla de oficina tradicional o una pelota inflable, que puede ser bueno para la espalda y el núcleo.

3. Utilice monitores montados

Los monitores montados suelen ser mejores que colocar monitores por todo el escritorio. Aunque se pueden montar en la pared, los soportes de escritorio son más prácticos. Incluso hay escritorios que ya vienen con soportes.

Cuando tu escritorio viene con soportes para monitores integrados, puedes instalar varios monitores ajustables sin estropear el escritorio o sin poder montarlos. Los monitores ocupan menos espacio cuando están montados en comparación con cuando están sentados encima de su escritorio.

4. Elimine las distracciones

Nada mata la productividad como las distracciones. Si se da cuenta de que algo le distrae del trabajo, elimínelo de su jornada laboral. Por ejemplo, mantén la puerta de tu oficina cerrada para que las mascotas y los niños no puedan molestarte, y no navegues por las redes sociales a menos que estés en un descanso. Si en tu casa hay distracciones relacionadas con el ruido, utiliza auriculares para escuchar música que te mantenga concentrado. La mayoría de las distracciones estarán bajo tu control.

5. Consigue un telón de fondo para las reuniones

Cuando tengas que presentarte a reuniones virtuales en Zoom u otra plataforma de videoconferencia, sólo tienes dos opciones: utilizar tu fondo real o activar la configuración de fondo falso. La mayoría de las veces, el fondo falso sólo se ve bien hasta que te mueves, y entonces te hace aparecer distorsionado. A menos que tengas una pantalla verde detrás de ti, suele ser mejor utilizar el fondo real.

Si no te gusta lo que queda a la vista de la cámara detrás de ti, todo lo que necesitas es un tapiz estéticamente agradable y un soporte. Puedes encontrar ambas cosas en Internet por un precio relativamente barato, y no te costará mucho trabajo montarlo. Si compras un telón de fondo especial para las reuniones, asegúrate de medir bien el espacio para comprar el soporte adecuado. Siempre puedes doblar un tapiz demasiado grande, pero no puedes cambiar la anchura mínima de un soporte.

6. Comuníquese con los demás en su casa

Tener la configuración ideal en tu oficina en casa es maravilloso, pero no podrás disfrutar de ninguna tranquilidad si la gente siente que puede interrumpirte en cualquier momento. Comunícate con todas las personas de tu casa para fijar tu horario de oficina y tener claros los límites de cuándo no estás disponible. Puede que tengas que poner un cartel en la puerta para indicar cuándo estás reunido y no se te puede molestar en absoluto, o puedes establecer un horario de oficina normal y, si alguien te necesita, que te envíe un mensaje de texto o un correo electrónico desde la otra habitación.

La forma de establecer tus horarios y límites depende totalmente de ti y debe basarse en lo que mejor se adapte a tus necesidades personales. Sin embargo, no ignores la necesidad de comunicarte porque, de lo contrario, sufrirás interrupciones constantes.

Prepárate para el éxito

La configuración ideal del trabajo a distancia tardará tiempo en perfeccionarse. Naturalmente, irás ajustando tu configuración a medida que descubras lo que te funciona mejor (y lo que no). La clave para crear una buena configuración es encontrar un equilibrio entre productividad, comodidad y estética, manteniendo los límites entre el trabajo y la vida personal.