Venezolanos varados en la frontera sur de México piden al presidente electo de EE. UU., Donald Trump, que intervenga para resolver la crisis política en Venezuela, lo que, aseguran, detendría las caravanas migrantes hacia el norte.
Un grupo de migrantes venezolanos varados en la frontera sur de México, especialmente en Tapachula, ha solicitado al presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, que intervenga para resolver la crisis política en Venezuela, que según ellos, es la principal causa de la migración irregular hacia el país del norte.
De acuerdo con datos de la Unidad de Política Migratoria del Gobierno mexicano, se detectaron 266,846 migrantes venezolanos de enero a agosto de 2024, representando más de una cuarta parte de la migración irregular total. Esta cifra refleja un incremento del 142.76% en comparación con el mismo período del año anterior, cuando se reportaron 109,920 venezolanos.
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Los migrantes señalan que la situación se ha agravado tras la reelección proclamada del presidente Nicolás Maduro, lo que ha empujado a miles de venezolanos a abandonar su país en busca de mejores condiciones. “Si quieren frenar la migración, fácil, ayuden a sacar a Maduro de allá y esto se va a acabar”, expresó Michell, una migrante venezolana que se encuentra en Tapachula.
Desde noviembre, las caravanas migrantes se han convertido en un tema polémico, especialmente después de que la presidenta Claudia Sheinbaum asegurara que los grupos ya no llegan a la frontera con EE. UU. Sin embargo, el presidente Trump ha insistido en que México debe hacer más para frenar el flujo de migrantes y ha amenazado con imponer aranceles si no se controla la situación.
Julio Solano, otro migrante, pidió a la presidenta de México reforzar la atención humanitaria hacia los migrantes que viajan en caravanas. “Nosotros le hacemos un llamado de atención a la presidenta de México para que apoye humanamente a los migrantes”, expresó Solano.
Mientras tanto, organizaciones como el Servicio Jesuita a Refugiados (SJR) y activistas como Luis Rey García Villagrán han advertido que, aunque la retórica sobre la migración ha cambiado, el flujo migrante sigue siendo significativo, con grupos pequeños avanzando desde Tapachula hacia otras regiones de México. Se estima que alrededor de 10,000 migrantes han salido en caravanas desde que comenzó la administración de Sheinbaum en octubre.