Una decisión arbitral desató violentos enfrentamientos entre aficionados en el Estadio 3 de Abril de Nzérékoré, dejando decenas de víctimas mortales y heridos.
Un partido de fútbol en la ciudad de Nzérékoré, Guinea-Conakri, terminó en tragedia este domingo con un saldo de al menos cien personas fallecidas y decenas de heridos tras una serie de estampidas generadas por enfrentamientos en el estadio. El incidente ocurrió durante la final de un torneo que enfrentaba a los equipos locales de Nzérékoré y Labé, y que contaba con miles de espectadores en el Estadio 3 de Abril.
Según un comunicado difundido por la radio y televisión pública RTG, las tensiones comenzaron cuando seguidores del equipo visitante manifestaron su descontento con una decisión arbitral. Los disturbios escalaron rápidamente cuando los aficionados comenzaron a arrojar piedras, lo que derivó en la intervención de la policía con gases lacrimógenos. Esto provocó el pánico entre los asistentes, desatando una serie de estampidas mortales.
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El presidente de transición de Guinea-Conakri, general Mamadi Doumbouya, confirmó la tragedia en un comunicado oficial. Expresó sus condolencias a las familias afectadas, deseó pronta recuperación a los heridos y aseguró que el Gobierno está tomando medidas inmediatas. “Desde ayer, el Gobierno está haciendo todo lo posible para dar las primeras respuestas a este trágico evento. Una misión de emergencia dirigida por el primer ministro ha sido enviada para evaluar las consecuencias”, afirmó Doumbouya.
Además, el presidente prometió la creación de una comisión de investigación para esclarecer las causas de la tragedia y establecer responsabilidades. Hizo un llamado a la calma y serenidad para gestionar la crisis de manera adecuada.
Según el portal local MediaGuinée, el encuentro formaba parte de un torneo en honor a Doumbouya, quien asumió el poder tras un golpe de Estado en septiembre de 2021. El Estadio 3 de Abril, que albergaba miles de asistentes en el momento de los disturbios, se convirtió en el epicentro de esta catástrofe.
Las escenas de violencia y caos dejaron una profunda marca en el país, que ahora enfrenta el reto de investigar las causas y brindar apoyo a las víctimas de esta tragedia sin precedentes.
