La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo defendió la reforma que elimina siete órganos autónomos en México, asegurando que no conduce al autoritarismo, sino que busca fortalecer las empresas públicas y combatir la corrupción.
En la conferencia matutina de Palacio Nacional, Claudia Sheinbaum rechazó las críticas que señalan que la desaparición de estos órganos autónomos podría llevar al país hacia un régimen autoritario. La mandataria explicó que los órganos como la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) y el Instituto Nacional de Transparencia (INAI) fueron creados no para acabar con los monopolios privados, sino para evitar que las empresas del Estado, como Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE), fueran reconocidas como monopolios.
“La desaparición de los órganos autónomos no significa que se acabe con la pluralidad ni que se establezca un gobierno autoritario. Lo que se busca es que el Gobierno regule adecuadamente, pero con un enfoque distinto”, destacó Sheinbaum. Añadió que la reforma tiene como objetivo “acabar con la corrupción, los privilegios y devolverles a las empresas públicas su papel como motores de la economía nacional”.
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La reforma propuesta por el expresidente Andrés Manuel López Obrador y respaldada por Sheinbaum fue aprobada en el Senado con 86 votos a favor y 40 en contra. Esta reforma elimina organismos clave como el INAI, la Cofece y el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), y transfiere sus funciones a diversas dependencias del gobierno. El dictamen ahora será enviado a las legislaturas estatales y a la de la Ciudad de México para su discusión y posible aprobación.
Sheinbaum resaltó que la iniciativa de simplificación orgánica busca mejorar la eficiencia del gobierno y reducir la burocracia, mientras que las funciones de regulación y supervisión seguirán siendo responsabilidad del Ejecutivo.
