Entre las víctimas se encuentra un comandante de la Policía Estatal; ataques en negocios y viviendas marcan la ola de violencia derivada de disputas del crimen organizado.
La violencia en Sinaloa alcanzó nuevos niveles con al menos 14 homicidios registrados en las últimas horas en los municipios de Culiacán, Badiraguato y Mazatlán. La creciente inseguridad está vinculada a disputas internas entre facciones del Cártel de Sinaloa tras la reciente captura de Ismael “El Mayo” Zambada en un aeropuerto de Estados Unidos.
En la capital del estado, 12 personas fueron asesinadas en distintos incidentes. Entre las víctimas se encuentra el comandante Francisco Javier Verástica, supervisor de la Policía Estatal Preventiva, cuyo cuerpo fue hallado debajo de un puente en la colonia Villa Bonita.
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Durante la madrugada del jueves, un negocio de máquinas tragamonedas fue atacado a balazos, dejando un saldo de cuatro muertos y cuatro heridos. Horas más tarde, un minicasino en la misma colonia fue agredido, resultando en dos muertes más.
Otros actos violentos incluyeron el incendio de un restaurante de la cadena de sushi “Ranch Roll” tras un ataque armado, así como el asesinato de una persona en una vivienda del fraccionamiento Valle Alto.
En Badiraguato, un cuerpo fue abandonado en el centro del municipio, envuelto en una lona, un claro mensaje de las tensiones entre grupos delictivos.
En Mazatlán, un comando armado disparó contra el conductor de una camioneta en la Zona Dorada, quien falleció poco después debido a la gravedad de las heridas.
Autoridades estatales atribuyen esta ola de violencia a las pugnas internas dentro del Cártel de Sinaloa, exacerbadas tras la detención de Zambada. Este hecho ha desatado una lucha por el control de rutas y territorios clave, particularmente en municipios estratégicos como Culiacán y Mazatlán.
Mientras tanto, empresarios de la región expresan su preocupación ante los ataques directos a negocios, que afectan la economía local y el turismo, especialmente en Mazatlán, uno de los principales destinos turísticos del estado.
Las autoridades locales han anunciado un refuerzo de la seguridad con apoyo de la Guardia Nacional y el Ejército, aunque los habitantes continúan demandando medidas más efectivas para detener la creciente violencia.
Sinaloa vive momentos críticos, con la ciudadanía atrapada entre las disputas del crimen organizado y la insuficiencia de las estrategias de seguridad pública.
