El presidente electo de EE.UU. amenaza con un arancel del 25 % a productos mexicanos y canadienses, provocando una caída en la moneda mexicana.
El peso mexicano registró una depreciación significativa frente al dólar la mañana de este martes, 26 de noviembre, tras las declaraciones del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump. El republicano anunció su intención de imponer un arancel del 25 % a todos los productos provenientes de México y Canadá a partir de enero.
De acuerdo con Bloomberg, el tipo de cambio se ubicó en 20.71 pesos por dólar a las 10:20 horas, lo que representa una pérdida del 2.24 % en comparación con el cierre anterior. Analistas de CIBanco indicaron que “el peso mexicano muestra una vez más lo sensible que es ante las declaraciones de Trump respecto a temas relevantes a la agenda bilateral comercial con México. Por el resto del día, el tipo de cambio podría fluctuar entre los 20.35 y 20.65 pesos en el mercado spot”.
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Donald Trump justificó las medidas arancelarias como una represalia por lo que calificó como “la invasión” de drogas y migrantes indocumentados hacia Estados Unidos. Según sus declaraciones, estos aranceles permanecerán vigentes “hasta que México y Canadá resuelvan fácilmente este problema”.
El mandatario electo también planteó imponer un arancel del 10 % a productos chinos, argumentando que esta medida busca frenar el flujo de fentanilo hacia Estados Unidos, otra prioridad en su agenda de gobierno.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, rechazó enérgicamente las amenazas de Trump mediante una carta oficial. En su respuesta, afirmó:
“Presidente Trump, no es con amenazas ni con aranceles como se va a atender el fenómeno migratorio ni el consumo de drogas en EE.UU. Se requiere de cooperación y entendimiento recíproco para enfrentar estos grandes desafíos. A un arancel vendrá otro en respuesta, y así hasta que pongamos en riesgo empresas comunes”.
Sheinbaum destacó la necesidad de fortalecer el diálogo y la colaboración para evitar una escalada de tensiones que podría afectar gravemente las economías de ambas naciones.
La posible imposición de aranceles ha generado preocupación en los sectores empresariales y financieros de México y Canadá. Ambas naciones mantienen estrechas relaciones comerciales con Estados Unidos bajo el T-MEC (Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá).
Los analistas advierten que esta medida podría desencadenar una guerra comercial que ponga en riesgo miles de empleos y la estabilidad de las cadenas de suministro en Norteamérica. En el contexto del cambio de administración en EE.UU., los mercados estarán atentos a posibles negociaciones para mitigar el impacto de estas declaraciones.
Este escenario reafirma la complejidad de las relaciones comerciales entre los tres países, destacando la necesidad de enfoques diplomáticos que prioricen la cooperación frente a la confrontación.
