Una noche de copas se transformó en un verdadero zafarrancho cuando un grupo de abogados decidió resolver sus diferencias a golpes
Una noche de copas en el bar Beer Life, ubicado en la avenida Santos Degollado, se transformó en un verdadero zafarrancho cuando un grupo de abogados decidió resolver sus diferencias a golpes.
El enfrentamiento, que rápidamente se trasladó a la vía pública, dejó un saldo de múltiples daños en el lugar, aunque no se reportaron heridos de gravedad, pero uno de los rijosos fue hospitalizado.
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Según testigos, los involucrados iniciaron una acalorada discusión al interior del bar que terminó desbordándose, convirtiendo la escena en un espectáculo bochornoso.
A pesar de los destrozos reportados y el caos generado, las autoridades optaron por no clausurar el establecimiento, ni realizar inspecciones tras el incidente. “Parecía que no había pasado nada. Llegaron, miraron y se fueron”, señaló un comerciante de la zona. El mismo disimulo que tienen con los tugurios de las laterales de la carrera a México, por compromisos.
Este incidente ha generado indignación entre vecinos y ciudadanos, quienes cuestionan la falta de acciones contundentes por parte de las autoridades. “Si esto hubiera pasado en otro lugar, seguro ya lo hubieran cerrado. Pero aquí todo sigue igual”, reclamó una vecina de la colonia.
Aunque el sainete protagonizado por abogados ha dado mucho de qué hablar, lo que más preocupa es la aparente indiferencia de las autoridades. Este tipo de hechos, lejos de ser anecdóticos, reflejan un problema mayor: la falta de regulación efectiva en espacios de convivencia nocturna.
Finalmente, ante el reclamo generalizado e la falta de acción de las autoridades, se procedió a llevar a efecto la clausura del establecimiento, por violación de horario.
