Sheinbaum y la economía de México: apuntes sobre el Presupuesto 2025

La impronta del nuevo Gobierno es la continuidad. Se mantiene el principio de austeridad republicana que garantiza sostenibilidad financiera y estabilidad cambiaria

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El nuevo Gobierno revela su programa económico presentando su primer presupuesto para 2025. Aquí los principales indicios sobre cómo será la política económica de Claudia Sheinbaum:

Principios fundamentales

Bienestar social con equidad, inversión pública estratégica, disciplina fiscal con austeridad republicana, simplificación administrativa y mayor eficacia operacional.

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La impronta del nuevo Gobierno es la continuidad. Se mantiene el principio de austeridad republicana que garantiza sostenibilidad financiera y estabilidad cambiaria. Continúa con la estrategia de evitar una reforma fiscal disruptiva, pero aumenta la apuesta por la mejora paulatina de procesos administrativos para reducir el gasto y la informalidad, y aumentar la recaudación y eficiencia tributarias. También continúan los programas de bienestar social y las inversiones emblemáticas del sistema de transporte ferroviario, fortalecimiento de la infraestructura y autosuficiencia energética.

Principales proyecciones

Crecimiento: se prevé una aceleración del crecimiento de medio punto porcentual impulsado por el consumo interno y los sectores intensivos en acero (minería, construcción y automotriz).

Inflación: Se proyecta una desaceleración al 3,5% al cierre de año.

Tasa de interés nominal (CETES 28ds estimado diciembre): reducción del 10% en 2024 al 8% en 2025.

Tipo de cambio ($/USD estimado fin de período): reducc1ón desde 19,7 $/USD en 2024 a 18,5 $/USD en 2025.

Déficit cuenta corriente: se proyecta un déficit estable del -0,4%, igual al que se estima que se alcanzará en 2024, pero inferior al -0,7% aprobado en el presupuesto 2024.

Precio del petróleo de exportación: 57,8 USD/barril.

Balance presupuestario

Se proyecta una reducción del déficit presupuestario desde el -5,0% estimado al finalizar 2024, al -3,2% PIB en 2025. Compuesto por un déficit del Gobierno federal del 4,4% y un superávit del 1,1% de parte de las empresas públicas (PEMEX, CFE). 

Se espera un superávit primario de 0,6% PIB en 2025, una reducción respecto al déficit del -1,4% estimado al finalizar 2024.

El déficit presupuestario -incluyendo compras y ventas de activos RFSP- se proyecta en 3,9% para 2025, una baja de 2 puntos porcentuales respecto a 2024 (5,9%).

Estos registros conducen a la estabilidad de la deuda pública que se mantiene en el 51,4%. 

Ingresos

Los ingresos totales representan un 22,3% PIB y se proyecta un crecimiento real del 3,3% respecto de 2024. Esto se explica, por un lado, gracias a la mayor actividad económica y, por el otro, como resultado de las medidas para fomentar el cumplimiento tributario (digitalización y simplificación de pagos) y combatir el fraude fiscal.

Continuando la estrategia fiscal de AMLO, no se proyecta una reforma fiscal integral ni aumentos de alícuotas ni creación de nuevos tributos.

Los ingresos petroleros crecerían 4,3% y los no petroleros 3,1% (tributarios 3%, no tributarios 10,4% y de organismos y empresas 1,3).

Se proyecta un incremento de los ingresos tributarios por aranceles a las importaciones del 8,8% como consecuencia del aumento de las tarifas desde un rango de 15-25% al de 5%-50%. Ello se debe a los acuerdos comerciales comprometidos con el tratado comercial TMEC.

Subirá un 1% la alícuota de los derechos especiales sobre minería y un 0,5% la alícuota de derechos extraordinarios sobre minería.

Gastos

Los gastos totales representan un 25,5% del PIB.

El presupuesto prevé una reducción nominal de los gastos del -1,9% en 2025.

Compuesto por una disminución del gasto programable del -4,1% y un incremento del gasto no programable del 3,5% explicado por un incremento del costo financiero de la deuda de 5,4%.

Dentro del gasto total, el 30% es no programable, incluyendo costo financiero de la deuda pública y participaciones a entidades federativas y municipios.Las aportaciones programables a las entidades federativas locales disminuirán un 4,6%.El gasto corriente programable se reducirá un 3,9%, el gasto en inversión un 14%, mientras que las pensiones subirán un 4,8%.Programas prioritarios sociales: Pensión para adultos mayores (58% del gasto social) y programa de becas Benito Juárez (16%).Programas prioritarios de inversión: Tren Maya (21% de la inversión) y Tren México-Querétaro (16%). 

Aproximadamente 1/5 del gasto programable se destinará al desarrollo económico, 2/3 al desarrollo social y 7,2% a Gobierno y poderes, órganos autónomos e INEGI.

La Administración pública federal recortará su gasto un -3,8%, debido a una disminución del gasto del Gobierno de un -22,9%, del gasto en desarrollo social del -0,7% y del gasto en desarrollo económico del 7,8%.