El expresidente López Obrador cuenta con protección militar limitada en su domicilio; la presidenta revisará esquemas similares para otros exmandatarios.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, confirmó en su conferencia matutina que el expresidente Andrés Manuel López Obrador cuenta con un esquema de seguridad proporcionado por elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) en su domicilio de Palenque, Chiapas. Sheinbaum enfatizó que esta protección es de carácter “mínimo” y forma parte de las funciones del cuartel cercano a su residencia.
“El expresidente tiene una seguridad mínima en su domicilio, y en todo caso, son parte del cuartel en donde vive, pero que realizan también otras tareas,” explicó Sheinbaum durante la conferencia.
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Además, la mandataria señaló que revisará si otros expresidentes mexicanos cuentan con algún esquema de protección, aunque destacó que la mayoría reside fuera del país. “Recuerden que casi todos los expresidentes viven fuera, con excepción de Fox. Calderón vive en España, Zedillo en Estados Unidos y Salinas ahora en España,” comentó.
De acuerdo con información publicada por El Universal, el esquema de seguridad para López Obrador está a cargo de un grupo de militares pertenecientes a la SEDENA. Esto se suma a la pensión mensual de 21 mil 659 pesos que recibe el exmandatario tras concluir su gestión.
Durante su mandato, López Obrador eliminó los privilegios como pensiones y escoltas personales a los expresidentes mexicanos, argumentando austeridad y justicia social. Sin embargo, la protección en su finca de Palenque refleja la necesidad de garantizar la seguridad de figuras públicas tras dejar el cargo, un tema que podría abrir un debate sobre las políticas actuales para los exmandatarios.
El caso de López Obrador contrasta con el de otros exjefes de Estado de México. Vicente Fox es el único que aún reside en el país, mientras que Felipe Calderón y Carlos Salinas de Gortari se encuentran en España, y Ernesto Zedillo vive en Estados Unidos.
Sheinbaum subrayó que analizará los esquemas de seguridad de estos exmandatarios para determinar si es necesario realizar ajustes o mantener las medidas actuales, destacando la importancia de equilibrar protección y austeridad.
