Sheinbaum indicó que su gobierno ya trabaja en un plan que será presentado al equipo de Donald Trump para resaltar la importancia de las y los mexicanos en la economía de Estados Unidos
“No estamos de acuerdo en que se trate a los migrantes como criminales”, dijo este jueves la presidenta Claudia Sheinbaum, después de que el republicano Donald Trump amenazara con utilizar a las Fuerzas Armadas para aplicar su plan de deportación masiva de migrantes. “Para eso existen las instituciones de justicia en cualquier lugar del mundo, y por eso ayer hice un especial énfasis y lo vamos a seguir haciendo, lo tenemos cuantificado y lo vamos a presentar en su momento públicamente, cuando tengamos las reuniones con el equipo del presidente Trump de la importancia del trabajo que realizan las y los mexicanos en Estados Unidos”, expresó la mandataria en Salón de Tesorería.
En su conferencia de prensa desde Palacio Nacional, Sheinbaum indicó que su gobierno ya está trabajando en un plan, el cual será presentado al equipo del presidente electo, Donald Trump, para resaltar la importancia de las y los mexicanos en la economía de Estados Unidos. “¿Cuántos recursos pagan en impuestos? El trabajo que realizan, que es de primera, de esos trabajadores y esas trabajadoras, entonces ese es un primer punto que es importante que lo definamos”, declaró.
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Sheinbaum indicó que en caso de que el gobierno de Donald Trump continúe con su plan de deportar a migrantes, México recibirá a los mexicanos: “Tenemos un plan para ello, pero vamos a trabajar previo a ello en demostrar que no tienen por qué deportarse a nuestros connacionales que están del otro lado de la frontera, que al contrario benefician incluso a la economía de los Estados Unidos”.
Asimismo, la mandataria destacó que la tarde de este jueves sostendrá una reunión con su gabinete para desarrollar distintos temas que van a tratar con la administración de Trump, que son: comercio, migración, seguridad y hasta cuestiones culturales y amistad, así como el T-MEC.
Trump no ha informado públicamente detalles específicos sobre cómo se ejecutarán estas deportaciones, aunque esa fue una de sus principales promesas durante su campaña presidencial. Para implementar este plan, Trump tiene previsto recurrir a la Ley de Emergencias Nacionales de 1976, que otorga al presidente poderes extraordinarios y le permite esquivar al Congreso para implementar medidas ante lo que debe ser percibido como una amenaza para la seguridad de Estados Unidos.
Trump ya utilizó este recurso durante su primer mandato en 2019, cuando declaró una emergencia nacional para redirigir miles de millones de dólares asignados al Pentágono hacia la construcción del muro fronterizo con México, una medida que enfrentó múltiples demandas judiciales. A lo largo de su campaña, Trump también prometió movilizar a reservistas de la Guardia Nacional para apoyar las deportaciones y sugirió incluso reubicar tropas estacionadas en el extranjero hacia la frontera sur de Estados Unidos para que aplicaran las leyes migratorias del país.
Estas medidas supondrían un cambio significativo en el papel que han desempeñado hasta ahora las Fuerzas Armadas, ya que la legislación estadounidense prohíbe estrictamente el uso del Ejército para labores de vigilancia nacional, según detalla en su web el Brennan Center for Justice.
