Con la presencia de todos los líderes del G20, salvo Vladimir Putin, comienza la Cumbre de Río con el lanzamiento de la Alianza Global contra el Hambre y la Pobreza, que incluye compromisos de 70 países y organizaciones para beneficiar a 500 millones de personas.
La Cumbre de jefes de Estado y de Gobierno del G20 comenzó este lunes en Río de Janeiro con el lanzamiento de la Alianza Global contra el Hambre y la Pobreza, una iniciativa del presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva que busca abordar algunos de los problemas más urgentes a nivel global, como el hambre, la pobreza y el cambio climático.
La alianza, que cuenta con 147 miembros fundadores, tiene como objetivo poner fin al hambre, empoderar a las mujeres y frenar el cambio climático, entre otros objetivos clave para el desarrollo sostenible.
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En la reunión, participaron todos los países del G20, con la excepción de Argentina, cuyo presidente Javier Milei ha expresado su desacuerdo con la agenda de desarrollo sostenible que impulsa la Alianza.
Entre los miembros fundadores de la iniciativa se encuentran 81 países, 24 organizaciones internacionales, instituciones financieras como el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), así como destacadas organizaciones filantrópicas, incluyendo las fundaciones Rockefeller y Bill & Melinda Gates.
Uno de los puntos destacados de la Alianza es el compromiso de unos 70 países y organizaciones internacionales para llevar a cabo cerca de 40 proyectos específicos que beneficiarán a millones de personas en situación de vulnerabilidad.
Entre estos proyectos se encuentran iniciativas como el plan de Burundi y Togo para transferir subsidios financieros a millones de personas, o el proyecto de Indonesia para garantizar alimentación adecuada a más de 82 millones de estudiantes.
En su intervención, Lula destacó la importancia de políticas públicas bien diseñadas para erradicar el hambre y devolver la esperanza a millones de personas. “Mientras haya familias sin comida en la mesa, niños mendigando en las calles y jóvenes sin esperanza de un futuro mejor, no habrá paz”, afirmó en un vídeo dirigido a los líderes del G20 al inicio de la Cumbre.
La Alianza se suma a los esfuerzos del presidente brasileño para abordar la crisis global del hambre, que afecta a 733 millones de personas, según la FAO. Lula también hizo un llamado urgente para que más países se sumen a esta iniciativa, destacando que 2030 es el último momento para alcanzar las metas de desarrollo sostenible.
El evento, que cuenta con la participación de 55 delegaciones, abordará también temas cruciales como la transición energética y la lucha contra el cambio climático, con una sesión programada para este lunes, y sobre reformas a la gobernanza global en la sesión de cierre prevista para el martes.
